Hay ciertas frutas desconocidas. Los lichis, por ejemplo, son una de ellas. ¿Pero alguna vez has oído hablar del mangostán? Se trata de un fruto blanco, con gajos delicados y una apariencia poco apetecible muy utilizado en la cultura oriental. Aunque en España son difíciles de conseguir, no es imposible. Seguro que si le preguntas a tu frutero de confianza te consigue algunos.

¿Qué beneficios tiene este fruto?

-El mangostán es un fruto muy rico en antioxidantes. Tiene propiedades antiinflamatorias y ayuda a combatir a los radicales libres y las células dañadas. Aporta una gran cantidad de minerales y vitaminas esenciales para el organismo como vitamina C, potasio, magnesio y hierro. También contiene xantomas, un compuesto químico natural.

-Se trata, además, de un remedio completamente natural para la hipertensión, y es beneficioso para el endurecimiento de las arterias. Y sobre todo, es un depurador natural de la sangre que reduce los niveles de azúcar y lípidos.

Pero sus beneficios no se quedan aquí. Su bajo contenido calórico y sus propiedades depurativas convierten a este fruto en un potente aliado a la hora de perder peso. Es diurética, al igual que la piña y lucha contra la retención de líquidos. ¿Sufres de estreñimiento? Tranquila, porque el mangostán te ayudará a ir al baño y además aliviará las molestias de la gastritis.

Espera, hay más: se trata también de un antibacterial y fungicida natural que aumenta las defensas.

¿Aún no lo tienes en la lista de la compra? Sus propiedades le preceden.

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