Ayer fue una noche muy especial para la carismática Paz Padilla. La humorista estrenaba su obra ‘El humor de mi vida’ en el teatro EDP Gran Vía en pleno centro de Madrid. Era un día lleno de ilusión y de magia para la presentadora de ‘Sálvame’, ya que después de muchísimo esfuerzo durante meses, por fin está obteniendo la recompensa. Con la obra, Paz pretende ayudar a aquellos que lamentablemente han de afrontar la muerte de un ser querido.

La gaditana contó con el apoyo incondicional de su hija Anna Ferrer y de su novio Iván Martín, entre otros muchos amigos. La joven ha estado muy amable con la prensa como habitualmente nos tiene acostumbrados y se sinceraba sobre el difícil pero a la vez precioso proceso que ha vivido su madre: «El proceso ha sido bonito. Ayer me dijo una cosa muy bonita (refiriéndose a su madre), ‘esta obra ya no es mía es de todos'».

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Anna contaba que su madre, aunque ha tenido que vivir dos pérdidas muy dolorosas, gracias a su actitud y a su forma de ver la vida lo lleva muy bien: «Ella está bien. Siempre tira hacia delante y quiere disfrutar la vida que son dos días», Anna también ha sacado la actitud de su madre y es una joven de lo más positiva y trabajadora.

Junto a la gaditana, han creado una marca de complementos llamada ‘No ni na’ y les va divinamente. «Estamos preparando cositas para la nueva colección y estoy agradecida por la acogida y por el cariño del público». No solo le va bien en lo profesional, en la personal también. Anna e Iván van poquito a poco en su relación y hacen una pareja encantadora: «Vamos sin prisa. Hemos vivido un año muy intenso, así que ahora tenemos planes de estar tranquilos y disfrutar los dos juntos.

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