Estamos viviendo una de las semanas de la Alta Costura de París más extrañas de todas. No hay desfiles. Lo virtual se ha abierto paso y son vídeos o sesiones fotográficas los encargados de sustituir el desfile a la antigua usanza. Tampoco se arremolinan en la capital francesa decenas de fashionistas luciendo sus mejores galas y fijando sobre el asfalto lo que se llevará la próxima temporada. La crisis sanitaria causada por la COVID-19 ha cambiado el ritmo de todo, también del mundo de la moda y, mientras algunos se adaptan a los nuevos tiempos, otros han querido mantener el legado de lo clásico, respetando, claro está, todas las nuevas medidas de seguridad.
Este es el caso de Jacquemus, que según se ha anunciado contará con un desfile físico que tendrá lugar el próximo día 16 de julio en una localización secreta cerca de París. Por supuesto, el aforo será reducido y tan solo acudirá un selecto grupo de invitados.
Según ha desvelado la firma en su perfil de Instagram, la colección se titula L’Amour y esta decisión responde más a una apuesta sostenible que a una decisión creativa, tal y como han querido comunicar.
«Hace un año decidimos reducir nuestro ciclo al mostrar la ropa de mujer y la de hombre juntas. Esto nos ha permitido reducir la cantidad de desfiles, compartir telas en ambas colecciones y reducir el ritmo de mi equipo y socios. Más que una opción creativa, es un modelo sostenible en el que creemos y que funciona para nosotros», comunicaba Jacquemus en una serie de tres publicaciones (algo habitual para la firma) en la que se revelan además algunos artículos de la colección que parecen tomar inspiración de los picnics veraniegos a través de vajilla y cubiertos de los mismos.
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