Antes de descubrir el look elegido por Doña Letizia para su viaje a Granada con Don Felipe, me rondaba otra idea. Pensé en una firma andaluza. Pensé en diseño local, con acento español. Un diseño con la ñ en su huella. Como en la inauguración de FITUR, donde la Reina lució un vistoso jumpsuit de Inés Domecq. Fui mucho más lejos y tiré de memoria. Me acordé del vestido rojo de Cherubina, que llevó en Sevilla hace dos años. También rescaté el modelo floral, espectacular y vibrante, de la cordobesa Matilde Cano. Un vestido que estrenó en Japón en 2019. Y Nana Golmar, otra creadora de moda de complementos con marcado acento del Sur que se ha colado en el vestidor de la Reina. ¿Qué firma sería la elegida? Pues no acerté.
Los Reyes viajaron a Granada el jueves 10 de junio. La cita era enorme. En La Alhambra. Don Felipe y Doña Letizia inauguraban en el Museo de Bellas Artes, en el Palacio de Carlos V,la exposición “Odaliscas. De Ingres a Picasso”. La muestra, impulsada por el Patronato de La Alhambra y el Generalife, reúne piezas de Picasso, Delacroix, Matisse, Chasseriau… Felipe VI y Letizia se interesaron por las piezas de Pablo Picasso.
En su recorrido por el palacio monumental nazarí, los Reyes se fotografiaron en el histórico Patio de los Leones.
Doña Letizia escogió de su armario el vestido verde menta de Maje Paris, que tantas otras veces le ha resuelto muy bien. Un diseño floral, alegre y muy visual, que tiene una gran particularidad, que lo mismo se adapta al frío que al calor: con unos salones cerrados o con unas cuñas de verano, con una cartera negra de piel o con un capazo playero… Pega con todo.
El año pasado, en la gira autonómica, Doña Letizia llevó este diseño de Maje Paris en su visita a Palma. Completó su estilismo con unas alpargatas de Mint&Rose. En esta ocasión, optó por unos salones destalonados de Carolina Herrera de color nude, que combinó con una cartera de mano de Felipe Varela en color morado.
Es un súper vestido y es súper versátil. Yo lo veo así. Tiene el detalle de la asimetría en la falda-pañuelo y el detalle de la cinturilla elástica con el punto nido de abeja, que entalla mucho la silueta. Súper favorecedor. Sin embargo, tenía yo en la cabeza que llevaría diseño español. Por cierto, el punto nido de abeja de toda la vida que arrasó en los setenta enaquellos vestidos de corte imperio con mini florecillas (yo tenía, me acuerdo)… pues regresa ahora con fuerza.
Fuente: Leer Artículo Completo