enos de un minuto. Eso es lo que dura el primer mensaje en el que podemos escuchar la voz (aunque muy bajito, como un hilo salido de detrás de su mascarilla) de Paloma Cuevas por primera vez desde que, a principios de julio, se conociera que se separaba de Enrique Ponce. Eso sí, quien espere unas palabras que aclaren qué pase en el proceso de divorcio que parece estar en ‘stand by’ por culpa del torero, no lo van a encontrar al darle al ‘play’.

La empresaria se ha dirigido a sus ‘followers’, pero para pedir que seamos responsables y nos pongamos la mascarilla ante el crecimiento de la cifra de contagiados y muertos por el coronavirus en nuestro país en las últimas semanas. Un pequeño vídeo con el que pretende concienciar a la sociedad de lo importante que es nuestro granito de arena para que la situación mejore.

Paloma, sin quitarse ese elemento de protección que se ha convertido en nuestro mejor complemento, pide que no nos quitemos la mascarilla. Sobre todo, para proteger a todas esas personas mayores, que están dentro del grupo de riesgo, y a quienes debemos la vida. Por el, ruega que hagamos el esfuerzo por muy incómoda que nos parezca.

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Estas palabras llegan días después de que Ponce haya tenido que ser intervenido y se le haya recomendado un confinamiento de nada menos que un mes. Un hecho que ha provocado que nos lleguemos a preguntar si es la ajetreada vida que lleva desde que comenzó a salir con Ana Soria lo que le ha llevado a ver cómo su salud se resiente.

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