Ha conseguido hasta convertirse en Papa. Si hay algún papel que te lleve al olimpo televisivo quizá sea ese pero no hay techo para Jude Law. Desde el martes 15 de septiembre le vemos en su último proyecto en la pequeña pantalla, El tercer día, evadiéndose de su realidad en una isla donde se topará con un festival de lo más extraño donde tradición y religión son los protagonistas. Para celebrar su nuevo paso por HBO demostramos que su carrera en este medio es tan relevante como la cinematográfica.

La Navidad de 1989 millones de familias celebraban las fiestas mientras la cadena ITV emitía la adaptación televisiva del cuento infantil de Beatrix Potter, The Tailor of Gloucester (El sastre de Gloucester). Pero en la casa de Jude Law además se celebraba su estreno en televisión tan solo un día antes de cumplir 17 años (nació el 29 de diciembre de 1972). En esta producción fue Sam, el ayudante del alcalde, al que vemos por primera vez al comienzo de la emisión (en el minuto 2.20):

Tan solo un año más tarde entró a formar parte del reparto de la nueva ficción diaria de ITV, Families. Las oportunidades no dejaron de llegar a sus manos porque en 1991 se cruzó con una historia con la que ha tenido la oportunidad de reencontrarse en el cine. Se trata de la producción británica Los casos de Sherlock Holmes, en la que consiguió un papel en el episodio Shoscombe Old Place.

Desde aquella época Law ya dejó claro que no le importaba implicarse en proyectos arriesgados y originales y lo demostró con el extraño corto The crane (1992). También debió entender que las adaptaciones literarias eran lo suyo porque intervino en The Marshal and the Madwoman (1993) junto a Alfred Molina.

Pasaron unos años hasta su siguiente proyecto en televisión y, en esta ocasión, se estrenaría detrás de la cámara dirigiendo el episodio A Bird in the Hand de la serie Tube Tales (1999). La idea de esta ficción era rodar diferentes historias en el metro de Londres a cargo de realizadores experimentados como Stephen Hopkins, Charles McDougall y Bob Hoskins y otros debutantes como Ewan McGregor y el propio Law.

Jude comprendió desde el principio de su carrera que ningún proyecto es pequeño y en el año 2000 estrenó un nuevo corto, Happy M’Gee, esta vez compartiendo secuencias con Ewan McGregor.

Los siguientes quince años los pasó centrados en su carrera en el cine pero Law sabía que, con un buen proyecto, acabaría volviendo a la televisión. Por eso, aunque pudimos verle como estrella invitada de Toast of London en 2015 en un pequeño cameo, su gran regreso estaba a punto de llegar.

Jude Law abre las puertas del Vaticano

En 2016 se estrenó el gran proyecto del actor británico en televisión. Sin saber si sería un éxito o no se lanzó a la piscina para convertirse en Pío XIII, el protagonista de The Young Pope bajo la batuta de Paolo Sorrentino. La serie, amparada por HBO, cuenta la historia del joven religioso Lenny Belardo, el primer Papa estadounidense, cuya ascensión parece que fue el resultado de una estrategia simple y efectiva de medios implementada por los Cardenales.

La propuesta fue tan original que la aceptación de la audiencia fue inmediata y la cadena decidió apostar por una segunda entrega con la incorporación de John Malkovic, The New Pope (2019). Sin duda, esta es la ficción televisiva más ambiciosa en la que Law había trabajado hasta la fecha, pero también es importante porque le devolvió a la pequeña pantalla.

Ahora parece que le ha vuelto a coger el gusto porque, tan solo un año más tarde, estrena su último trabajo, El tercer día. Esta serie es casi una obra experimental en que se combinan los códigos del audiovisual en pantalla con el teatro. Law protagoniza los tres primeros episodios que transcurren en Verano, nombre de su bloque argumental, y Naomi Harris (saga 007, Calypso en Piratas del Caribe, Moonlight) le toma el relevo en Invierno.

Y aquí llega la particularidad; la conexión entre ambas historias se lleva a cabo a través de un evento especial en directo desde Londres llamado Otoño que se emitirá en HBO tras la emisión del bloque liderado por Jude Law. Además, la ficción nos regala la presencia de Emily Watson (Chernobyl) a quien siempre es un gusto ver en pantalla.

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