QUÉ HA PASADO

• Miran conserva una foto con la letra de su madre.

• Nasud se enfada con Yaren.

Temerosa ante la posibilidad de que sus planes fracasen, Azize enfrenta a Esma: “¿Por qué Miran conserva una foto de su madre? Te dije que todo lo de Dilsah debía desaparecer. Si tienes algo que ver con la carta, lo pagarás”.

Otro frente va a abrirse para la matriarca. Cansada de su suegra, Sultán da pistas a Miran sobre el drama que vivió durante el embarazo de su segundo hijo, supuestamente fallecido, y le muestra la cicatriz en su vientre. Sin dudarlo, el joven Aslanbey va a pedir explicaciones a su abuela, que guarda silencio.

Nasud se lamenta del daño infligido a Reyyan

Al ver de nuevo el sufrimiento de su madre por ese hijo que no conoció, Gonül estalla y se desahoga con Firat: “¡Solo nos rodean mentiras y dolor!”. Luego, le confiesa el secreto que la quema por dentro: “Mi hermano vive. La abuela me obligó a divorciarme a cambio de contármelo, pero no quiere decirme dónde está”. Atónito, el hijo de Esma pregunta de quién se trata sin sospechar que puede ser él. “No lo sé todavía, pero pronto lo abrazaré”, responde ella.

Mientras Reyyan intenta descansar en casa de los abuelos de Melike, Nasuh habla de su pesar con Yusuf: “Nunca quise a esa chica porque no era de mi sangre. ¿Por qué pecado la condené?”. También Cihan se siente culpable. “Todo el daño que hicimos a mi sobrina fue para esconder la maldad de Yaren. ¿Qué hemos hecho mal con tu hermana?”, llora ante Azat. Más tarde, va a ver a su hija para abrirle su corazón e intentar comprenderla: “¡Tenías un corazón tan hermoso! Pero te distanciaste. ¿Qué te pasó? No te conozco”.

En el palacio Aslanbey, dos individuos irrumpen en la habitación de Sultán durante la noche y la llevan, amordazada y con los ojos vendados, ante la poderosa Azize. “Es tu última oportunidad. Mantén la boca cerrada o no seguirás con vida”, la amenaza.

Ajeno a lo que está sucediendo, Miran averigua dónde se encuentra su enamorada y le insiste en que deben estar juntos: “Solo así seremos felices”.

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