Pierpaolo Piccioli traslada el lujo de Valentino a la vida real

Pierpaolo Piccioli se está convirtiendo poco a poco en toda una leyenda en el mundo de la moda gracias a su trabajo en Valentino. El diseñador romano lleva demostrando un talento innato y una intuición especial para la estética desde que desembarcó en 1999 en el diseño de accesorios de Valentino pero, en 2016 cuando dijo adiós a su fiel compañera Maria Grazia Chiuri debido al fichaje de esta en Dior, fue cuando demostró su verdadero potencial al frente de la dirección creativa de la casa italiana.

Bajo el reinado de Piccioli la firma esta viviendo uno de sus mejores momentos. El diseñador fue premiado en 2018 con el premio British Fashion Award a diseñador del año, creó los cuatro looks de boda de Marta Ortega y ha logrado hacer de sus diseños ultrafemeninos, coloridos y voluminosos toda una seña de identidad que, junto a los maquillajes de Pat McGrath que los acompañan en las pasarelas, se han convertido en lo más esperado de la semana de la moda de Milán.

Si hay algo que siempre acompaña al diseñador es la esencia y la individualidad, algo a lo que siempre ha querido dar importancia reafirmando sus raíces. Esta vez ha hecho toda una oda a su ciudad natal a través de una serie de fotografías que no han tardado en viralizarse en Instagram gracias a su naturalidad, el aspecto de fotografías no profesionales tomadas con el móvil y las protagonistas que lucen los diseños del italiano.

Modelos profesionales se entremezclan con gente de a pie, de mayor edad e incluso un grupo de simpáticas monjas que posan para Piccioli ante la atenta mirada de los turistas. Todo ello forma parte de un proyecto para A Magazine Curated By, en el que ya han colaborado otros genios de la costura como Giambattista Valli, Iris Van Herpen o Martin Margiela.

Junto a las fotografías, Pierpaolo ha querido compartir lo que este proyecto significa para él y lo que ha tratado de narrar a través de moda e imagen: «Ha sido un proyecto que significa mucho para mí. Me pidieron que contara una historia, y no soy un narrador canónico. La alta costura es mi lenguaje: los colores, las telas y los dibujos me han servido para narrar durante mucho tiempo. Ahora, teniendo que traducir todo mi universo en un trabajo editorial, comencé a reflexionar sobre todo en lo que creo, tratando de evaluar mis pensamientos sobre el arte, la belleza, la vida y la sociedad.», escribía el director creativo.

También ha querido hablar del escenario elegido, su ciudad natal y capital italiana: «Sin duda Roma es mi musa. Es el paradigma de una realidad estratificada. Roma ha acogido siglos de ganadores y perdedores, oraciones y condenaciones, maravillas y desgracias, las luchas de la guerra y las luces del cine, esplendor y sacrificio, majestad y humildad. Es el territorio natural para la complejidad, el mayor ejemplo de inclusión. Roma no es solo el lugar de donde vengo, es parte de lo que soy, y la humanidad de la ciudad inspirará toda la historia.»

«Cuando me pidieron que fuera el curador de este número mi primera reacción fue pensar en las personas que quería estar conmigo en este proyecto. Incluso antes de planificar el contenido, las caras fueron lo primero. Sandra, Margareth, Maria Francesca y Roberta estaban entre las muchas caras que quería ver. Representan una parte de mi vida por varias razones y algunas de estas razones están vinculadas al mensaje que quería compartir. La moda es un lenguaje y, como cualquier otro medio de comunicación, puede usarse para unir o dividir. La moda es mi lenguaje y, a través de ella y a través de la belleza que puede crear, quiero levantar la voz para hablar sobre lo que realmente me importa: inclusión, libertad de expresión, tolerancia, humanidad y amor. Estas cuatro mujeres increíbles y feroces no están modelando para vender un bolso de mano, están modelando valores. Representan el mundo de mis sueños, un mundo sin límites, un mundo donde la verdadera esencia de las personas significa igual dignidad, derechos y respeto.», escribía Pierpaolo Piccioli debajo de la foto más viral de la colección, la que reúne a cuatro monjas posando con el bolso Rockstud Spike de la firma italiana.

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Sandra, Margareth, Maria Francesca & Roberta. “The only real elegance is in the mind; if you’ve got that, the rest really comes from it.” Diana Vreeland BTS#CharlesHTraub @amagazinecuratedby @danthawley #spikebag @maisonvalentino When I was asked to be the Curator for this issue of A Magazine my first reaction was thinking about the people that I wanted to be in this project with me. Even before planning the content of it, faces came first. Sandra, Margareth, Maria Francesca and Roberta where among the many faces I wanted to see. They represent a part of my life for a number of reasons and some of these reasons are tied to the message that I wanted to share. Fashion is a language and, as any other means of communication, it can be used to bond or divide. Fashion is my language and through it and throught the beauty it can create I want to raise my voice to talk about what really matters to me: inclusivity, freedom of expression, tolerance , humanity and love. These four amazing and fierce women are not modelling to sell a handbag, they are modelling values. They represent my dream world, a world with no boundaries, a world where the true essence of people means equal dignity, rights and respect. Always. Pp

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