Los mejores veranos empiezan con un vestido de Zara o H&M y una buganvilla

Un simple vistazo a Instagram bastará para confirmarlo: el verdadero posado playero ya no es en bañador al borde del mar como se empeñaban las revistas, más bien con vestido –ese que llevas reservando para una ocasión especial desde que soñabas con salir de casa–, y una buganvilla de fondo. A este paso, el arbusto con más seguidores del mundo.

Bautizada en honor al Conde de Bougainville que lideraba la expedición a Brasil en la que fue "descubierta", se cree que la planta no fue clasificada por el botánico Commerson como se dio por hecho, sino por su ayudante, Jeanne Baret. La primera mujer en circunnavegar el mundo y la primera mujer (occidental) en plantarse ante esta especie maravillada por sus colores vívidos, lo hizo vestida de hombre. Nada que ver con los vaporosos y etéreos atuendos con los que asociamos hoy, en parte gracias a las redes sociales, en parte gracias a Audrey Hepburn, esta trepadora de la que, curiosamente, no nos maravilla su flor, sino las brácteas que la protegen.

Abundante en los climas cálidos, tiene sentido que nos remita a las vacaciones. En Canarias, en México, en Grecia. El verano es más verano cuando posamos con nuestro mejor vestido delante de una buganvilla. Como Audrey Hepburn con su vestido rosa de Givenchy. Como Marilyn Monroe con vestido blanco palabra de honor y su sonrisa eterna. Como la influyente de moda con vestido negro y mirada fija al suelo.

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No importa tanto el color. El vestido buganvilla no tiene que ser fucsia, ni tan siquiera rosa. En cambio, tiene que ser especial. El vestido buganvilla es el que llevas reservando para tus vacaciones, el que te compraste con la esperanza de un verano mejor, el que te hará sentir y verte guapa. El vestido buganvilla es cualquiera de estos 10 diseños de Zara y H&M con los que inmortalizar el mejor verano de tu vida.

© Cortesía de Zara

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