El entretiempo puede ser complicado para muchas cuestiones estilísticas. Medias sí o medias no, jersey o camisa, vestido fluido de verano o punto invernal… sin embargo, hay ciertas prendas con las que no hay duda que valga, ya que pertenecen por completo a las semanas que se sitúan entre cambios de temporada. El mejor ejemplo de ello es la gabardina o trench. Este abrigo, inventado allá por 1880 por Thomas Burberry, fue creado específicamente para la lluvia, pero debido a su ligereza son idóneas para lucir en primavera o verano, llueva o no.
Inspiradas por Burberry y su reconocible paleta de colores camel y beige, las gabardinas se han vestido continuamente de estos tonos tierra ultracombinables, además de clásicos azules marino o negros. Sin embargo, al clasicismo más elegante y sobrio le salen cada vez más competidores. El año pasado la gabardina de toda la vida se transformaba gracias al viralísimo diseño de cuadros de JW Anderson y este 2020 muta por completo dejando de lado su tejido habitual para vestirse de la tendencia más fuerte de la temporada, el efecto piel.
Si bien las pasarelas propusieron estos abrigos de carácter noventero y setentero de cara al otoño, durante los pasados meses han sido las sobrecamisas de piel o las americanas de cuero las que más han logrado dominar el panorama pero que ahora, abrirán paso y se llenaran de más color y de un favorecedor brillo acharolado para dominar la moda de los próximos meses.
Otoño/Invierno 2019-2020
Casi todas las firmas coincidieron en elevar el efecto piel como máxima tendencia y muchas en hacerlo especialmente a través de la gabardina. Las versiones negras más punk, como las propuestas de Alexander McQueen o Dior, estuvieron a la cabeza pero también hubo alguna sorpresa a todo color.
Primavera/Verano 2020
De cara a la nueva temporada las gabardinas de piel o vinilo se llenan de alegres colores. Rojos, granates, verdes o tonos flúor bañarán las gabardinas más tendencia de los próximos meses.
En el ‘street style’
Las fashionistas que se han dado cita tanto en la semana de la moda de Copenhague como en la actual Fashion Week neoyorquina no han dudado el lucir este práctico abrigo. Bien sea en las versiones mate de cuero o piel o de vinilo y charol, a todo color o en pragmáticos tonos marrones oscuro y negros, las calles parecen tener claro que la gabardina de la temporada no es, ni de lejos, la camel.
Las prescriptoras de estilo han lucido esta prenda bien sea como complemento a looks sencillos coronados por vaqueros o para culminar un look en clave total leather. Asimismo, las versiones que más destacan llevan cinturón y grandes solapas.
¡Lo quiero!
¡Lo quiero!
¡Lo quiero!
¡Lo quiero!
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