– "Perdona, ¿estáis hablando de…?", dice la amiga A.
– "Sí, ¡es tan mono!", añade la B.
– "¡A ver! ¿Qué composición tiene? ¡Es de los que no les salen bolitas!", comenta la C.
– "Ya os diré, porque me lo he comprado pero todavía no me ha llegado", zanja la D, ganadora de la partida por ser la única de todas que ya lo tiene.

Esta conversación, tal real como la vida misma, acaba de suceder, y las interlocutoras, redactoras todas de Glamour, hablaban del mismo conjunto de Zara sin la necesidad de describirlo. Solo una lo tenía visible en la pantalla del ordenador. El resto lo conocía y comentaba porque es sin duda uno de los hits de la primavera. Hablamos del cárdigan color azul bebé y el top a conjunto de la nueva colección de la firma de Inditex.

© Cortesía Zara

Esta monería, vendida por separado aunque nadie debería osar a no llevarse el combo a casa, es, como avanzábamos hace una semana, una de las seis tendencias que arrasarán contra todo pronóstico este año porque hubo un día que prometimos, sin sentido, no llevarlas. ¿Qué dirán nuestras madres cuándo vean que hoy morimos de amor por una rebeca color pastel y un top idéntico para llevar debajo? Que por fin, amigas, hemos entrado en razón. Eso es lo que pensarán.

Similar a las combinaciones que le hemos visto más de una vez a la francesa que mejor lleva los pantalones vaqueros rectos, Jeanne Damas, este cuco dos piezas es tan tendencia como romántico, y las pequeñas flores bordadas que tiene en la parte delantera explican, junto al color, el amor que sentimos por ambas prendas. Queremos el top de tirantes anchos y amamos el cárdigan que lo mejora. Deseamos que no se torne viral para ser las únicas en llevarlo y a la vez sabemos que estamos pidiendo un imposible.

© Cortesía Zara

Y si nuestro deseo de no querer arrancar el top del cárdigan, y el cárdigan del top es comprensible, subimos un poco más la apuesta: querer llevarlo siempre con pantalones slouchy blancos como los elegidos por las que más saben de moda de Zara. La combinación de colores claros es tan deliciosa como un helado de fresa y nata, y tan apetecible como la primera cucharada de la tarrina.

A estas alturas del mes de enero seguro que Jeanne Damas ya ha fichado nuestra combinación ganadora del invierno y nuestra compañera Mar ya lo ha estrenado y asegurado que como temíamos, queda de miedo.

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