Los cuatro hermanos y los sobrinos de Ana Obregón, su gran apoyo en el momento más duro de su vida

No hay consuelo para Ana Obregón (65) y Alessandro Lequio (59) tras la muerte de su hijo Álex a los 27 años. Tras dos años de lucha, este miércoles conocíamos la triste noticia del fallecimiento del joven tras algo más de dos años de lucha contra el cáncer. Álex se encontraba en Barcelona donde estaba siendo sometido a un nuevo tratamiento contra su enfermedad y junto a él han permanecido sus padres sin separarse ni un instante de su lado estos dos meses. Además, las dos hermanas de Ana, Celia y Amalia, han querido estar junto a ella para darle todo su cariño en el que sin duda alguna es el peor momento de su vida.

La familia Obregón siempre ha estado muy unida, en los buenos y en los malos momentos por los que han pasado. Antonio García Fernández (94) y Ana María Obregón Navarro siempre han luchado para que sus hijos se ayudaran siempre. El patriarca de los Obregón fue un empresario de gran fama en los años ochenta que había salido adelante con mucho tesón y trabajo. Con 13 años entraba a trabajar en una tienda como chico de los recados y por las noches estudiaba hasta ser el número 1 de los delineantes. Más adelante se hizo aparejador y terminó siendo arquitecto técnico.

A post shared by Ana_Obregon Oficial (@ana_obregon_oficial) on

Con poco más de 20 años, Antonio conoció y se casó con Ana María, hija única del empresario Juan Obregón Toledo, que fue quien ayudó a Antonio a montar su primera inmobiliaria. El gran momento empresarial le llegaría con La Moraleja, que a mediados del siglo XX era una finca privada propiedad de José Luis de Ussía y Cubas, conde de los Gaitanes, y cuyos terrenos habían sido coto de caza de Carlos III.

El conde ofreció en 1969 a Antonio la compra del 95% de las acciones de la propietaria de esos terrenos, una operación que rondó los 4 millones de euros (700 millones de las antiguas pesetas) y la zona se convertía en la ubicación ideal para el desarrollo del norte de la capital, según explicaba el empresario en 2011 en El Mundo. El éxito fue total, se vendieron todas las parcelas a precio de oro y Antonio optó por construir varias casas para que sus hijos vivieran cerca de ellos.

A post shared by Ana_Obregon Oficial (@ana_obregon_oficial) on

Cinco hermanos muy unidos

El primero de los hijos de Antonio y Ana María es Juan Antonio, nacido en 1953. El mayor de los hermanos de Ana es el más desconocido y discreto de la familia. Estudió Arquitectura y cuenta con un estudio, Ego Internacional. Con una vena emprendedora heredada de su padre, Juan Antonio es fundador de las gafas de sol Flamingo, en la que también trabaja como Jefe de Operaciones su hijo Juancho. Juan Antonio está casado desde 1984 con Marta Vázquez de Castro y tiene tres hijos.

El otro hermano de Ana es Javier (62), que también ha intentado algunos negocios como con la empresa Fun & Things aunque sin mucho éxito. Javier estudió Económicas en la Universidad San Pablo CEU y tras terminar la carrera pasó tres años en la Universidad de Georgetown donde llevó a cabo un curso de Administración y Gestión de Empresas. Además de trabajar en el departamento de contabilidad de Jots y de ser Consejero responsable de promociones de Niesa durante 12 años, también ha sido Consejero Delegado de Promotorauno durante 20 años (de 2003 a 2013), y desde febrero de 2017 es socio ejecutivo de Whizz Capital, compañía que se dedica a la gestión de activos inmobiliarios y patrimonio.

A post shared by Ana_Obregon Oficial (@ana_obregon_oficial) on

Javier se casaba el 5 de octubre de 1990 con Paloma Lago, modelo y presentadora que tuvo su gran momento de éxito con la llegada de las televisiones privadas a España. El matrimonio, que se separaba diez años más tarde, tuvo un hijo, Javier, que hoy tiene 23 años y que tras estudiar Business Administration en el IE y haber realizado varios cursos de posgrado en Hong Kong, Londres y en el Instituto de Estudios Bursátiles de Madrid, trabaja desde septiembre de 2019 como analista de inversiones en la consultora Deloitte. Javier García Obregón volvía a casarse por lo civil en marzo de 2003 con la decoradora María Tevenet. Se habían conocido tres años años antes y celebraron el enlace en la intimidad en la localidad madrileña de San Agustín de Guadalix. Con ella ha tenido dos niños más que hoy tienen 12 y 13 años.

Celia y Amalia, sus mejores amigas

Pero sin duda, las hermanas pequeñas de Ana, Celia (64) y Amalia (63), son a las que la bióloga está más unida. Ellas son sus mejores amigas según ha contado Ana en más de una ocasión. Celia está casada con Ignacio Vega-Penichet López desde mayo de 1984, fecha en la que contrajeron matrimonio por todo lo alto en la iglesia de San Jerónimo el Real de Madrid. Siempre extremadamente discreta, es difícil encontrar alguna imagen de Celia en los medios de comunicación. Su nombre salía a la luz en su juventud por un romance con el torero Palomo Linares. La hermana menor de Ana Obregón siempre ha estado al frente de las empresas familiares, ya que desde muy joven mostró su gran capacidad para la gestión empresarial.

A post shared by Ana_Obregon Oficial (@ana_obregon_oficial) on

Celia e Ignacio tienen una hija, Celia, que mantenía una relación muy estrecha con Álex Lequio desde niños. Celia hija adoraba a Aless y a su tía Ana, y fue habitual verles veranear juntos en Marbella y Mallorca cuando aún eran pequeños. De hecho, el último mensaje en las redes sociales de Álex fue dirigido a su prima: “Una y otra vez, a través de la eternidad, brillaremos juntos”, escribía el joven junto a una tierna foto de la infancia de ambos.

View this post on Instagram

Nunca había sentido tanto dolor. Nunca jamás habrá nadie como tú. Nunca he visto a alguien luchar tanto por vivir. Mi hermanito pequeño, mi alma gemela, mi cómplice y mi socio. Es raro, te acabas de ir pero siento tu energía conmigo como si estuvieras sentado a mi lado como todos esos viernes en tu casa. Te has ido demasiado pronto, teníamos muchos sueños y planes por hacer. Eternos 27 y eterno tú, porque tu huella ha quedado marcada para siempre en todas las personas que te conocían. Mi compañero de superación, de batallas, de aventuras, de conversaciones sobre filosofía, historia, economía, amor, dios, vida… Cómo me gustaba discutir contigo, argumentar y que nos sacáramos de nuestras casillas y de nuestras zonas de confort. De reírnos hasta llorar y de llorar juntos hasta quedarnos dormidos. Nuestras jams sessions, improvisando, yo con la guitarra cantando y tu rapeando como si fuéramos rockstars. Siempre bailamos a nuestro ritmo, fuera del sistema y lo seguiremos haciendo, porque tu energía me da fuerza y estés donde estés, se que me acompañarás para hacer todo lo que habíamos planeado. Quería agradecerte todos los recuerdos que tengo, no hay uno solo de ellos en el que piense y no pare de sonreír (a veces hasta me empiezo a reír sola y la gente me mira raro). Eres el más grande y ahora también eres eterno. On and on, through eternity we will shine. Bros until the world blows, sonriendo, like we always do. I love you forever.

A post shared by Celia Vega-Penichet (@thegocvp) on

A post shared by Celia Vega-Penichet (@thegocvp) on

Celia ha querido despedirse de Álex en las redes: “Nunca había sentido tanto dolor. Nunca jamás habrá nadie como tú. Nunca he visto a alguien luchar tanto por vivir. Mi hermanito pequeño, mi alma gemela, mi cómplice y mi socio (…) Siempre bailamos a nuestro ritmo, fuera del sistema y lo seguiremos haciendo, porque tu energía me da fuerza y estés donde estés, se que me acompañarás para hacer todo lo que habíamos planeado”, escribía rota de dolor. La joven, de 28 años, es abogada y además es una apasionada del motor, los caballos (desde niña ha competido en hípica), el deporte y la moda, como puede verse en sus redes sociales.

A post shared by Ana_Obregon Oficial (@ana_obregon_oficial) on

Amalia fue modelo en su juventud y es que siempre ha destacado por su belleza y elegancia. En 1956 se casaba con el coreógrafo Giorgio Aresu (que comenzó en España haciendo las coreografías del Un, dos, tres), con quien tuvo dos hijas, Amalia y Carolina. El matrimonio se separaba en 1997. Carolina, de 31 años, es muy conocida en el mundo del deporte ya que ha sido campeona sub-21 de España y de Europa por equipos en hípica.

Su hermana Amalia, de 32, además de estudiar Comunicación Audiovisual, siguió los pasos de su madre en el mundo de la moda y llegó a desfilar en la Pasarela Cibeles siendo elegida rostro revelación en 2007. Amalia ha hecho abuelos a sus padres en 2019 y ha fundado con su madre una empresa de estudios de mercado, Polimnia Investments.

En imágenes

La vida de Álex Lequio en imágenes: de su niñez frente a las cámaras al amor por Ana Obregón, su madre coraje

Fuente: Leer Artículo Completo