El ayuno intermitente está de moda desde que varias celebrities confesaran que es casi lo único que hacen para mantener esos cuerpos que tanta envidia dan. Desde el fornido Hugh Jackman a nuestra gurú wellness favorita, Elsa Pataky, muchos han caído rendidos a los encantos de esta forma de alimentación. No es para menos porque ayunar (con cabeza y sentido común) presenta muchos beneficios saludables y es una buena forma de cuidar el organismo y mantenerse en un peso saludable. Pero cuando el objetivo es perder peso a cualquier precio ¿es el ayuno intermitente una buena opción? Para responder a esta duda en Estados Unidos han dado una vuelta de tuerca más a las reglas del ayuno y se han inventado la dieta del guerrero que promete pérdidas de peso significativas en poco tiempo. ¿De verdad funciona como afirma? Y lo más importante, ¿es una forma de ayuno segura? Te lo contamos todo.
¿En qué consiste el ayuno intermitente del guerrero?
La norma básica a respetar en la dieta del guerrero es comer muy poco durante 20 horas y centrar la ingesta principal de alimento diaria en una ventana de cuatro horas por la tarde. Pero no queda ahí, también tiene un plan específico de qué se puede comer y qué no.
Durante la primera semana durante el periodo de ayuno (las 20 horas en las que se come poco) se permite tomar agua, té, café y pequeñas cantidades de caldo, huevo duro, verdura y fruta cruda, yogur y requesón. Y durante las cuatro horas en las que sí se puede comer, esa primera semana hay que limitarse a legumbres, cereales integrales y verduras crudas (la ensalada de toda la vida).
En la segunda semana de dieta están permitidos los mismos alimentos durante la fase de ayuno pero en la de comida se evitan los cereales y se puede combinar proteína animal con verduras cocinadas (asadas o cocidas) y frutos secos.
En la tercera semana los alimentos de la etapa de 20 horas no varían, pero en la de cuatro horas se hacen un par de días con alta ingesta de hidratos de carbono y otros dos días con baja ingesta de hidratos de carbono.
¿Es saludable hacer este tipo de ayuno intermitente?
Hay pocos estudios que hayan estudiado los pros y contras de alimentarse con una sola comida diaria en una ventana horaria tan pequeña como es cuatro horas. La mayoría de los estudios que nos hablan de las ventajas del ayuno intermitente suelen tener ventanas de ayuno más ajustadas a la realidad.
Una investigación que intentaba averiguar cómo afectaba a la resistencia a la insulina concentrar toda la comida diaria en una única comida (adoptando un modelo de 20 horas de ayuno) lo único que pudo comprobar es que este tipo de alimentación, aunque sí lograba una pérdida de peso, hacía que la sensación de hambre y apetito fuera mayor que en una alimentación que permitiera tres comidas al día. De hecho, ninguno de los participantes en el estudio fue capaz de adaptarse a esta forma de comer y experimentaron un incremento de su presión arterial y niveles de colesterol.
Además, los expertos describen que este tipo de ayuno es casi incompatible con una ingesta equilibrada de los micronutrientes necesarios, por mucha pérdida de peso que fomente. Y nos lanzan un aviso: para adelgazar no es necesario hacer estas cosas. Una dieta que no se puede mantener a lo largo del tiempo no es una dieta saludable.
Fuente: Leer Artículo Completo