Roc\u00edo D\u00farcal, as\u00ed fue la vida de la artista de alma espa\u00f1ola y coraz\u00f3n mexicano

“Nunca pensé en ser cantante ni actriz, luego el destino…”. Estas son palabras de una mujer que no sólo hizo historia en nuestro país, ya que se convirtió en una de las artistas más respetadas y admiradas de México. María de los Ángeles de las Heras Ortiz en el registro civil, Marieta para sus amigos, y Rocío Dúrcal para el mundo.

El 25 de marzo de 2006 nos dejaba a la edad de 60 años una de las mujeres más queridas fuera y dentro de nuestras fronteras. La dura batalla contra el cáncer la combatió siempre con una sonrisa, como cuando cantaba esos corridos mexicanos que la encumbraron.

Pero, ¿cómo consiguió esta madrileña del barrio de Cuatro Caminos triunfar y ser la segunda intérprete española que más discos vendió tras Julio Iglesias? Tenemos que echar la vista atrás, a los años cincuenta, cuando la mayor de seis hijos de una familia humilde de la capital empezó a escribir su historia.

De Marieta a Rocío Dúrcal

El abuelo de Marieta, conserje del colegio de La Paloma, la empezó a llevar a los concursos de la radio, que era la plataforma de la época para las personas que soñaban con ser artistas.

Fue allí donde Luis Sanz, un cazatalentos, se fijó en esta chiquilla de quince años que entonaba la canción “La sombra vendo”. Fue el empresario quien le cambió el nombre: Rocío, por una costumbre de su abuelo al recordarla como el rocío matutino. El apellido se eligió señalando al azar el pueblo de Dúrcal en el mapa de España.

Rocío Dúrcal se convertía en niña prodigio con su primera película, “Canción de juventud”, y con ese primer sueldo compró colchones para su familia. Hizo catorce películas “pastel”, como ella misma las llamaba. “Los niños prodigios siempre han existido en todo el mundo. En España se les utilizó para ganar dinero”, manifestó la Dúrcal en una entrevista décadas más tarde. Pero siempre dijo que ella en su casa era Marieta, una niña a la que le gustaba jugar con muñecas. La niña se iba convirtiendo en mujer.

La película “Más bonita que ninguna” cambió su vida. Con 21 años, Rocío conoce a los dos hombres que marcarán su vida sentimental: Juan Pardo y Antonio Morales, Junior. Los jóvenes pertenecían al grupo musical Los Brincos, a los que se les encarga componer las canciones de la película.

Rocío empezó a salir con Juan Pardo y Junior con Marisol, gran amiga de la madrileña. Juan y Junior deciden abandonar el famoso grupo y formar un dúo. Su primer tema, “Dos niñas”, lo dedicaron a sus novias. “Yo empecé a salir con Juan, pero me gustaba Antonio. Lo hice para que se fijara en mí”, reconoció Rocío. El dúo del filipino y el gallego se separó porque querían cantar en solitario. Años más tarde, el hermano de Antonio, casado con la actriz Fedra Lorente, desveló que la razón real era que Pardo estaba enamorado de Marieta.

En 1969 la artista comenzó a salir con Antonio. Un joven nacido en Filipinas, de padre español y madre filipina, que con sólo cinco años empieza a tomar clases de solfeo y piano, y a los diez años se instala en nuestro país.

El 15 de enero de 1969, nueve meses después de iniciar el noviazgo, la pareja se casa en el monasterio de El Escorial. Era una pareja de cine. En aquella boda se dieron cita muchas estrellas de la época como Lola Flores, Carmen Sevilla, Celia Gámez o Paquita Rico. La luna de miel duró veinte días en Venecia, donde la pareja no tenía reparos de recibir a los periodistas españoles para hacer reportajes. Eso sí, gratis.

La pareja decidió formar el dúo “Unisex”, muchos dicen que fueron dos adelantados a su tiempo. Hicieron gira en España y México, pero en Cancún tuvieron que poner punto y final al grupo. La artista estaba embarazada de su primera hija. Once meses después de su boda, el 12 de diciembre de 1970, nació su primera hija, Carmen María Guadalupe Dolores. Este último nombre fue en honor a su madrina, Lola Flores. La pareja tuvo dos hijos más, Antonio y Shaila.


Siendo ya madre de tres hijos, Rocío Dúrcal es detenida en febrero de 1975, por la huelga de actores de España. Fue su comadre, Lola, quien se presentó en los calabozos de la Dirección de Seguridad en la Puerta del Sol para sacar a Marieta. Aquella imagen de Rocío con el puño en alto acaparó muchas portadas.

Rocío ya no era la niña prodigio y tomaba las riendas de su nueva vida profesional. En 1977 protagonizó junto a Barbara Rey ‘Me siento extraña, la película más taquillera del año. Eran los años del destape y fue el primer beso lésbico de nuestro cine. La actriz, avergonzada, no fue al estreno y nunca vio la película. “Hay cosas en tu carrera que no te gustaría hacer y que haces. Hay veces que me recrimino a mí misma no haber dicho no”.

Crisis con Junior

Fue entonces cuando Junior grabó un disco en solitario. Sólo triunfó en Filipinas, su país de origen. Marieta se quedó en España y él firmó tres películas allí. Muchos cronistas de la época cuentan que ella se presentó en Manila y le dio un ultimátum a su marido: “O vuelves a España o esto se acabó”. Al parecer, la madrileña tenía un ataque de celos, ya que a su marido se le relacionaba con una compañera, Vilma F.

Y así fue. La pareja decidió que Junior se quedara en casa y fuera Rocío quien continuará con su carrera artística, eso sí, su marido siempre estuvo en la sombra montando los espectáculos de Marieta. La Dúrcal triunfaba, pero echaba de menos a su familia, que estaba en Madrid. Ella misma se echaba en cara que sólo pudo celebrar dos cumpleaños de su hija mayor.

Rocío había conocido en México a Juan Gabriel, quien la convirtió en las reina de las rancheras. Para el mexicano era una diva, protagonista de todas sus letras. En un primer momento, Rocío se negó a cantar rancheras, pero accedió y cada una de las canciones que entonaba se convertía en un éxito, tanto en México como en España.

Pero esta relación tenía fecha de caducidad. Cuentan varias razones: una, que el cantautor cada vez quería parecerse más a su diva, y otra la que cuenta el periodista Manuel Román: “También influyó en aquella ruptura los continuos rumores de que Juan Gabriel, homosexual, estaba colado hasta las trancas por Junior, aunque no hubo nunca ningún tipo de relación sexual, a pesar de las falsedades vertidas por el secretario del mexicano”. Tras aquella ruptura artística, Juan Gabriel sustituyó en su corazón a Rocío por Isabel Pantoja. Pero ésa es otra historia.

Rocío era ya la Reina de las Rancheras cuando sus hijos mayores, Carmen y Antonio, con 11 y 7 años, formaron un dúo infantil que triunfó con el tema “Sopa de amor”, especialmente en Japón, donde los niños hicieron tres anuncios de chocolatinas y grabaron sus canciones en nipón.

Pero el dúo sólo duró un año, ya que sus padres pensaron que aquello era demasiado grande para dos niños y que su lugar estaba en España, creciendo como todos los chicos de su edad.

Los niños llevaban en la sangre los genes artísticos. La mayor, Carmen, quería ser actriz. Su gran oportunidad le llega con la popular serie “Al salir de clase”, en 1997. Un año antes hizo abuelos a sus padres. Su hijo Christian nació el 29 de octubre de 1996, fruto de su relación con Óscar Lozano, con quien no llegó a casarse.

Tras romper con Lozano, por la vida de Carmen pasaron el torero Rafi Camino, y los actores Antonio Hortelano y Rafa Reaño. Pero su verdadero amor llego con el empresario Luis Guerra, con quien se casó en 2011.

Por su parte, Shaila quería ser la digna sucesora de su madre, aunque sabía que no lo iba a tener fácil. Se ha hecho un hueco en Estados Unidos y en México, donde además de cantar ha participado en varias telenovelas.

“Mi sueño es triunfar en España”, nos reconocía hace unos meses la pequeña de la saga. Shaila vive en Estados Unidos junto a su marido, Dorio Ferreira, al que conoció en 2004 y con quien se casó en Acapulco cuatro años más tarde.

Los años felices de la familia estaban a punto de apagarse. En 2001, a Rocío le detectan un tumor en el útero, y tiene que cancelar su gira.

A Junior se le cae el mundo encima. Todos hicieron piña entorno a ella, que se negaba a ponerse peluca y luchó hasta el final.

El 25 de marzo de 2006, Rocío Dúrcal se iba para siempre. España y México lloraban la pérdida de Rocío Dúrcal.

Pero el llanto pronto se convirtió en guerra familiar por la herencia de la matriarca. Carmen y Antonio demandaron a su padre en 2009, y Shaila no quiso posicionarse.

Fue Luis Guerra, pareja de Carmen, quien reunió a Junior con sus hijos para solucionarlo. Cinco años más tarde, en la madrugada del 14 al 15 de abril de 2014, Junior vuela con el amor de su vida tras fallecer en su casa.

Pero quedaba la saga familiar de Rocío Durcal y Junior. Su hijo Antonio Morales por ejemplo tuvo dos hijos.

Rocío Durcal fue toda una artista cuyo recuerdo aún permanece en la memoria de todos. Cantante y actriz, derrochó aquí y al otro lado del charco su eterna sonrisa.

Gracias a esa eterna sonrisa, se ganó el cariño de todos los que la rodeaban.



Fuente: Leer Artículo Completo