La historia de la posible reconciliación entre Rocío Flores y su madre ha sido uno de los temas de conversación indiscutibles de la televisión mientras la joven se encontraba en Honduras participando en ‘Supervivientes’. Ahora que la cuarentena de Rocío ha acabado y que ha podido poner rumbo a Málaga después de su estancia en Madrid tras volver de la isla, Antonio David Flores y su hija han aprovecha la libertad de la fase 2 para acudir a un bufete de abogados.
Bufete en que se encarga de los asuntos legales de Antonio David y en el que pasaron dos horas. Después, acudieron al notario. Parece quela nieta de Rocío Jurado tenía muchos pendientes legales tras su paso por Cayos Cochinos. Probablemente, relacionados con toda la información que se ha dado sobre ella y su madre en las últimas semanas.
El pasado 10 de junio finalizaba el encierro de la joven tras volver de Honduras, y desde entonces: no ha perdido el tiempo. Visitó a su tía Gloria Camila en un reencuentro de lo más entrañable, acudió a resolver asuntos legales que requierían su atención, y tras esto, junto a su padre hizo unas compras en un centro comercial, donde pasó por la peluquería antes de abandonar la capital mientras su padre, permanece en Madrid por motivos laborales.
Le seguiremos la pista a Rocío, que de momento, no duda en compartir sus reencuentros como hemos podido apreciar en la foto con su pareja Manuel Bedmar, en la que destaca no solo la complicidad física de ambos, sino la pérdida de peso de la joven debido a las condiciones extremas del concurso.
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