La reina Sofía ha reaparecido este sábado para participar como voluntaria en la limpieza de una playa de Málaga. La iniciativa es parte de la campaña ‘1m2 por las playas y los mares’, del Proyecto Libera de SEO/BirdLife y Ecoembes con la que colabora la reina emérita desde 2018 a través de su fundación. Este es el tercer año en el que doña Sofía se une a los miembros de este proyecto como ‘héroe Libera’, como se refieren a quienes luchan contra la basuraleza, es decir la basura que plaga la naturaleza.

Coincidiendo con el Día Internacional de la Limpieza de Playas, la reina emérita se ha vestido con vaqueros, se ha remangado la camisa, se ha colgado el bolso a modo de bandolera, se ha puesto guantes y, por supuesto, mascarilla, para recoger los residuos que dejaron en la Cala del Moral, en Rincón de la Victoria, quienes pasaron allí un día de playa despreocupados del medioambiente.

Esta es una de las poquísimas veces que hemos visto a la reina Sofía en los últimos meses, y la primera desde que regresó de Mallorca. Este verano, cuando el rey emérito se ha exiliado en Abu Dabi tras las informaciones sobre sus negocios y su supuesta fortuna ilícita, doña Sofía ha mantenido el perfil más bajo posible. Oficialmente y como presidenta de la fundación que lleva su nombre, ha participado en la liberación de una tortuga marina en Mallorca rescatada en aguas baleares. Extraoficialmente, aunque captada por los focos, la vimos de compras en Palma con su hermana la princesa Irene de Grecia, y de merienda con unos amigos.

Su reaparición en Málaga se produce solo unos días después de que Corinna zu Sayn-Wittgenstein, la examiga de don Juan Carlos haya concedido una entrevista a la revista Paris Match en la que responsabiliza a la familia real, doña Sofía incluida, de la crisis de la monarquía.

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