Manchego de nacimiento, José Mota se ha convertido en el gran protagonista del humor televisado con programas donde actúa, presenta e imita a personajes famosos, siempre pegado a la actualidad, con un estilo propio, sutil, razón por la cual se ha metido en nuestras casas y en nuestras vidas. Como prueba un botón: en la última Nochevieja presentó ’31D Un golpe de Gracia’, en el que se hizo acompañar de la flor y nata del humor español: 50 humoristas, entre quienes se encontraban Mariano Mariano, Fernando Esteso, Las Virtudes, Martes y trece, Santiago Segura, Félix el gato, y Marta González de Vega, entre otros muchos.
Para testar si el humor es una buena medicina para combatir el coronavirus y cómo andamos de humor los españoles en tiempos que no invitan a la risa precisamente, es por lo que he querido charlar con José Mota, el hombre, el padre, el marido, el actor, guionista, y presentador estrella de televisión.
José, ¿el humor es la puerta de salida a la esperanza?
El humor es una de esas tablas que flotan en el agua en medio del naufragio. Nos solemos agarrar a ella de manera inconsciente porque nos ayuda a digerir mejor todo lo que nos ocurre alrededor.
¿Es la herramienta que nos ayuda a sobrellevar momentos tan críticos como los que estamos viviendo?
Es una herramienta que nos hace más libres, por eso hay que abrazarlo sin miedo, porque el miedo y el temor nos hacen esclavos; la sonrisa siempre es liberadora, y en un momento así, como el que estamos viviendo, nos sirve como muleta, no cabe duda.
Las redes sociales están llenas de chistes sobre el coronavirus. ¿Es la mejor manera de combatirlo?
Es el nuevo vehículo en el que viaja el ingenio del pueblo y el más rápido; casi siempre el contenido es del día, ahí continuamente se están reponiendo las estanterías del humor, es una pequeña forma de ganarle la batalla a este bicho maldito.
Hay quien se aprovecha de las tragedias para expandir el odio y la crispación.
Yo creo que las circunstancias extremas, al igual que el dinero, no cambian a la gente, simplemente la descubren. El que en situaciones así alimenta el odio es porque el odio siempre estuvo en él, y quizás encuentre en ciertos escenarios el vehículo perfecto para depositar toda esa negrura. Hay gente que en el odio vive más cómoda que en el amor porque el amor exige compromiso y generosidad. Vivimos en una sociedad en la que a veces se admira el “malismo” como si se tratase de “inteligencia”. Para mí el primer síntoma de inteligencia es la bondad.
¿Qué líneas rojas no deberían traspasarse?
Quizá aquellas que menoscaben el honor personal de los demás, pero no me gustan los prohibidos, quizá deberíamos simplemente ser coherentes con lo que cada uno sienta y piense con respecto a esto. Normalmente el respeto es un concepto fundamentado en el sentido común y de esto afortunadamente todavía nos queda algo.
¿Cuál fue la finalidad de su espectáculo de Nochevieja al reunir a 50 cómicos?
Sólo pretendí homenajear a todos los compañeros de la comedia porque, cuando yo llegaba a Madrid con la maleta cargada de ilusiones, ellos ya llevaban años faenando en esta profesión. Es un homenaje a los referentes que he tenido en el humor.
¿Quién podía imaginar que tres meses después de ese programa, el golpe lo daría un virus invisible?
Nadie, ojalá nos demos cuenta de que la lucha del hombre contra el hombre es definitivamente un sinsentido, ahora todos tenemos un nuevo enemigo común. Las futuras guerras que pueda librar el ser humano van a ser, sin duda, contra estos bichos.
¿Con quién de los que participaron mantiene una relación más estrecha?
Segura, Flo, Josema , Millán, More, Collado, pero siento la misma admiración por el resto. Me quito el sombrero con Félix El Gato o Tony Antonio, que llevan toda la vida guerreando en la comedia intentando hacer la vida más amable a los demás.
¿No existe rivalidad entre ustedes?
En absoluto: lo que siento por mis compañeros es admiración y ganas de pasar más tiempo con ellos si es posible, no me gustaría mirar atrás y decir después con tristeza por qué no haría esto o aquello, El tiempo se va muy rápido, lo que debas abrazar, hazlo ya.
Llevó a Millán, con el que no se llevaba muy bien.
Por supuesto, es un compañero por el que siento una gran admiración y respeto. Hubo un tiempo en el que estuvimos distanciados, pero como te he dicho antes, la vida es muy corta para estar permanentemente cabreado, no tiene sentido. Millán y yo disfrutamos hoy de una buena amistad.
Se han suspendido programas, cerrado cines y teatros, lo que está causando una grave crisis en el sector.
Sin duda esto está trayendo una crisis en el sector sin precedentes. Pasará tiempo hasta que los espectáculos vuelvan a estar llenos de nuevo, y ojalá pronto. De repente hemos descubierto que somos más vulnerables de lo que pensábamos.
Necesitarán imaginación y mucho dinero para recuperarse.
Sí, quizá debamos rearmar el puzzle social de nuevo y con algunas fichas colocadas en distintas casillas. Aquí ha pasado algo gordo, y tenemos que aprender de ello.
¿Por qué ningún político habla de cultura?
Quizás porque no les interesa un pimiento.
¿Quiénes serán sus héroes de la próxima Nochevieja?
Los héroes son y serán el pueblo.
¿Y los villanos?
Los otros.
¿Cómo superar el dolor ante la pérdida de un ser querido?
Dios mío, eso debe ser terrible, no poder dar el último abrazo a las personas que más te han querido en este mundo. Todo mi cariño para ellos y a todos los mayores que desafortunadamente nos han dejado, vaya para ellos el mayor de mis abrazos y admiración, se sacrificaron por nosotros y vivieron momentos muy complicados para dejarnos una vida digna, y sin embargo muchos de ellos han tenido que partir sin ni siquiera un adiós. Es muy duro.
¿Hemos recuperado relaciones familiares que se habían perdido?
Sí, yo creo que esto va a servir para tomar conciencia de que las cosas importantes anidan en lo pequeño, pero es terrible que tengan que suceder este tipo de cosas para que nos demos cuenta: somos muy frágiles, más de lo que pensábamos.
Tiene tres hijos adolescentes. ¿Cómo viven esta anomalía?
Mi hija Daniela es más consciente porque ya tiene 12 años y sabe perfectamente lo que hay; los dos pequeños me preguntan: ¿por qué ese bichito quiere hacer daño a las personas? Al ratito se olvidan y se sumergen en su mundo de juegos y en el de los deberes del cole, en el cual también nos sumergimos los papás en estos días.
Las situaciones extremas ponen a prueba las relaciones de pareja. ¿Qué está siendo lo más difícil para Patricia y para usted?
Intentamos llevar lo mejor posible el día a día, no es nada fácil con tres niños, pero en los momentos más duros pienso que quien lo está pasando mal son los enfermos, familiares, sanitarios, toda la gente de servicios en general que con su generosidad y trabajo están haciendo posible que la palabra esperanza tenga un sentido. Sólo puedo estar agradecido: gracias a todos ellos.
¿Está en peligro la libertad de expresión?
No se pueden poner puertas al campo, hoy puedes decir lo que pienses a través de las redes sociales. Ese margen de libertad no creo que peligre, la libertad de expresión es fundamental y tan necesaria como el aire que respiramos.
Algunos humoristas han sido juzgados, ¿afectará a su estilo elaborado e ingenioso?
El día que me ocurra esto , dejo de hacer este trabajo. No me gustan los prohibidos, nunca los he soportado, otra cosa es que cada uno libremente haga o deshaga lo que le dé la gana.
¿Se siente más Quijote o Sancho?
Fue la insensatez del Quijote la que me sacó de mi tierra en busca de refriegas artísticas, y luego, Sancho me mantuvo con los pies fuera del tiesto a golpe de garrotazo y pies quietos ahí.O sea, que si tengo que elegir me quedo con Don Panzote de la Sancha, que es mitad y mitad, ni Pal uno ni pal otro.
¿Ha tenido que luchar con muchos molinos de viento hasta llegar donde ha llegado?
Es más importante la refriega en la lucha con el molino que la conquista soñada. El fin no justifica los medios, al menos para mí, que me importa muchísimo más el camino por donde voy andando hacia el supuesto logro final.
¿Qué añora de su infancia?
El cuando éramos eternos, el cuando siempre era aquí y ahora y nunca mañana, pero no el mañana que yo digo ese de MAÑANA……
¿Qué valores enseñan a sus hijos?
Intento decirles quiénes son a través de los valores que me inculcaron mis padres como el respeto o la dignidad, para evitar que el día de mañana venga alguien que no conocen y les dé una identidad falsa.
¿Qué le pide a la vida?
Intentar ser la mejor persona que pueda, creo que es lo único que nos vamos a llevar de verdad, muchas veces invertimos gran parte de nuestro tiempo en amasar bienes materiales, y de repente en situaciones como ésta, te das cuenta de que las únicas accionesque de verdad importan son las que no cotizan en bolsa.
¿Quién es José Mota?
Nació en Montiel, Ciudad Real, el 30 de junio de 1965.
Trayectoria: Durante 18 años formó el dúo ‘Cruz y Raya’ con el humorista Juan Muñoz, a quien había conocido haciendo la mili y con el que dio el salto a TVE. En 2007 comienza su carrera en solitario con éxito, como humorista, guionista e imitador. En 2009 estrena en TVE un programa de humor, ‘La hora de José Mota’, por el que fue galardonado con el Ondas al Mejor programa de entretenimiento. Durante dos años presentó junto a Anne Igartiburu las campanadas de Fin de Año. En 2012 ficha por Mediaset España, donde emprende varios proyectos en Cuatro y en Telecinco. De vuelta a TVE ha presentado los especiales de Nochevieja desde 2015 hasta 2019, ‘El último Golpe de Estado’, en el que reunió el pasado año a 50 cómicos. Ha protagonizado la serie de humor ‘El hombre de tu vida’, una comedia que se emitió en Argentina e Hispanoamérica Ha trabajado en cine y teatro, y doblaje. El último de sus espectáculos: ‘Dos tontos y yo, con Florentino Fernández y Santiago Segura’.
Familia: Casado con la actriz Patricia Rivas; tienen tres hijos: Daniela, José y Valeria.
La foto favorita de José Mota
“Esta foto es para mí muy entrañable, especial para mí porque estoy con las chicas del equipo de futbol del Atlético de Madrid, con las que pasé un día, y a las que me gustaría que se les diera el sitio que les corresponde”.
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