El pasado marzo, cuando estalló la pandemia del coronavirus, la reina Isabel II decidió abandonar Buckingham para instalarse de manera provisional en el castillo de Windsor hasta que la crisis sanitaria no supusiera una amenaza para su salud. Pero lo que en principio solo iban a ser unos meses fuera ya es la ausencia más larga de la monarca, que nunca ha estado tanto tiempo fuera de Londres.
De hecho, cuando termine sus vacaciones en Balmoral volverá a recluirse en Windsor. Según se ha podido saber, enBuckingham no se la espera hasta bien entrado 2021. Lo que sigue siendo un misterio es si las próximas Navidades acudirá con toda la Familia Real a su casa de Sandringham como marca la tradición.
Porque desde luego en los próximos meses no tiene intención de pisar esta propiedad ubicada en Norfolk, ya que de ser así, seguramente no habría tomado la decisión de montar un autocine en los jardines que rodean esta mansión.
Al parecer, la reina habría dado permiso para que se acondicione el terreno para que los habitantes de la zona puedan disfrutar del séptimo arte sin riesgos. De ahí que hayan apostado por un formato muy popular en Estados Unidos y en alza desde que comenzó la desescalada queconsiste en acudir con tu propio vehículo al recinto para, a través de la radio del coche, escuchar la película que se proyecta.
La selección de títulos que aparecen en el programa es de lo más diversa: Ha nacido una estrella, Rocketman, Bohemian Rhapsody, 1917, Toy Story… Eso sí, que nadie acuda pensando que van a ver a alguien de la Familia Real por allí porque los organizadores ya han avisado que no va a ocurrir. Algo así costaría mucho más que los cerca de 40 euros que cobran por entrada.
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