Hay veces, no pocas, que la realidad supera con creces la ficción, y que el argumento de la vida es mucho más rocambolesco que cualquierguion digno de Oscar. Pues bien, la historia que hoy nos ocupa es de esas que cualquier autor de ‘best sellers’ hubiera matado por escribir, porque tiene todos los ingredientes para atrapar al lector: dramas familiares, traiciones y luchas fratricidas, corrupción, herencias millonarias, apellidos aristocráticos y rimbombantes y hasta obras de arte de valor incalculable desaparecidas. Si pensaban que la herencia de Paquirri era la única envenenada en el culebrón protagonizado por Isabel Pantoja y Kiko Rivera y que los líos de Susana García-Cerecedo eran de película, es porque aún no conocen los que enfrentan a Camilla de Borbón Dos Sicilias y su hermanan Christiana. Esta es su historia, y les aseguramos que no es una cinta de Fellini como en las que participó su madre, Edy Vessel, que llegó a ser secundaria en ‘Ocho y medio’, la obra maestra del genio italiano.
Para entender la lucha en los tribunales por una herencia millonariaque enfrenta a Christiana con su madre Edy y su hermana Camilla hay que remontarse a los años ’70, cuando el patriarca de la familia, Camillo Crociani, amasó una ingente fortuna como directivo de Finmeccanica, uno de los principales grupos industriales italianos de la época. Pero la codicia le jugó una mala pasada y el empresario fue juzgado (y condenado) por corrupción en una cruzada que hizo que se tambalearan los cimientos políticos y financieros del momento, y que terminó con la familia huyendo de la justicia a un exilio dorado en Méjico. Tras su muerte en la década de los 80, la no menos codiciosa Edeodora se traslada a Nueva York con sus hijas y, de ahí, regresan años después a Europa para recomprar la empresa familiar y cumplir con otro de sus sueños: emparentar con la nobleza del viejo continente.
Edy Vessel se casa en segundas nupcias con el conde Pierluigi Vitalini, pero sigue buscando por todos los medios un buen matrimonio para sus hijas. Sí, en este punto a nosotras también nos recuerda a la historia de la ‘Cenicienta’, pero sigamos, que la realidad sigue siendo más entretenida que los cuentos de hadas. La ex actriz consigue que Christiana se case con otro conde italiano, Bante Boncompagni Ludovisi, aunque el matrimonio dure solo cuatro meses; y que Camilla haga lo propio un año después con Carlos de Borbón Dos Sicilias, duque de Castro y rival del Duque de Calabria como jefe de la casa real de las Dos Sicilias (aunque eso en Italia no significa nada desde que se proclamó la república en 1948). Y claro, tanta intromisión en la vida de sus hijas, mezclado con grandes dosis de avaricia y muchos millones de herencia, hace que la relación entre las tres explote y salpique (no diremos de qué) todo a su alrededor.
Christiana poco a poco empieza a darse cuenta de que su madre y su hermana van apartándola de la familia y, de paso, de la fortuna familiar, y en 2011 comienza la guerra en los tribunales: sabedora de la herencia millonaria que su padre había dejado antes de morir, descubre que su madre había sacado cerca de 170 millones de euros de un fondo fiducidario en las Bahamas a nombre de su hermana y ella, para repartirlo solo con Camilla y dejarle a ella fuera de la ecuación. En 2017, la justicia le da la razón y obliga a Edy Vessel y a su hija favorita a reconstruir el fondoque habían vaciado e informar a Christina del estado de las arcas familiares para resarcirle con la parte que le corresponde, incluyendo el paradero del ‘Hina Maruru’ de Gauguin, un cuadro valorado en más de 50 millones de euros propiedad de la familia.
Sin embargo, este drama familiar de traiciones, corrupción, ambición y herencias envenenadas, sin embargo, parece que no ha terminado: tres años después del fallo judicial, las acusadas siguen sin desvelar el paradero de la obra de arte, por lo que, en un ultimátum del tribunal, podrían tener que pagarle a la damnificada Christiana una multa millonaria. Como en las buenas sagas del cine… ¡continuará! Y estaremos pendientes paradarles una segunda entrega.
Fuente: Leer Artículo Completo