Emma Ferrer, nieta de Audrey Hepburn: Nunca se iba de compras ni derrochaba en ropa

Emma Ferrer Hepburn, de 26 años, vivió su infancia rodeada del legado de su abuela. Aunque la estrella de Hollywood había fallecido hacía apenas un año de que naciera su nieta, Ferrer creció con su permanente presencia. Admirada por millones de personas, y referente de inspiración imperecedera, Audrey Hepburn pervive todavía en el imaginario de varias generaciones. Y eso, cuando se trata de tu propia abuela, es algo difícil de asimilar.

Después de haber probado como modelo (su presentación "oficial" fue en 2014) , Emma Ferrer, hija de Leila Flannigan y Sean Hepburn Ferrer (fruto del matrimonio entre Mel Ferrer y la actriz) , ha encontrado su propio camino. Tras haber estudiado pintura clásica en Florencia, en 2018 inauguró en Nueva York una exposición dedicada al proceso creativo de la moda, Ideas Get Dressed , en la galería SAPAR Contemporary. "La idea surgió porque siempre había trabajado en la moda y en el arte, yo misma como artista, y quería mostrar el trabajo que se dedica a planear las prendas y todo lo que sucede antes de que se termina una colección", revela Ferrer a Vanity Fair. La muestra incluyó bocetos de diseñadores como Zac Posen o Manolo Blahnik.

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La joven Ferrer, que conserva la sonrisa de Audrey Hepburn, también prepara un libro sobre su abuela junto a su padre. "Estamos escribiéndolo juntos. Él desde el enfoque biográfico y yo analizando cómo mi abuela sigue marcando tendencia a día de hoy, intentando entender por qué triunfó su estilo e iconografía, cómo se forjó la leyenda alrededor de ella y su influencia en la moda", cuenta.

"Investigando para el libro he aprendido mucho sobre ella, cómo su infancia le influyó tanto en su personalidad", comparte Ferrer. "Vivió la guerra cuando era niña, estuvo a punto de morir de desnutrición, y por eso, entendió la importancia de la frugalidad, la simplicidad. Ello se tradujo en su manera de vestir, su estilo reservado y modesto. Solía hacer todo lo posible por agradar, siempre enviaba cartas y flores de agradecimiento, y cuando estaba en los rodajes a veces cocinaba el almuerzo para todo el equipo… Creía en la simplicidad y en encontrar tu propia identidad".

"Para ella, su familia era lo primero, la anteponía a todo. En los últimos años de su vida quiso estar fuera de los focos para tener la libertad de salir por la ciudad, hacer la compra, ir al mercado, y estar en casa con tranquilidad. Por eso eligió ese estilo de vida más sencillo", cuenta la modelo y activista. "Mi padre recuerda que cuando era niño ella nunca se iba de compras ni derrochaba en ropa. Si él necesitaba ropa nueva, se lo llevaba a una tienda de barrio y le compraba varios pares de camisas y pantalones en diferentes colores que le duraran, y listo".

Una de las cosas que ha adoptado de su abuela es su compromiso con los demás. Hepburn, que dedicó gran parte de su vida a colaborar con Unicef, la ha inspirado en su lucha por los derechos de los inmigrantes, algo que está defendiendo como embajadora de UNHCR y que conoció de primera mano tras estar en Italia y observar las condiciones de los refugiados llegados desde Grecia. "Mi padre me contó que después de que mi abuela volviera de su primer viaje a Somalia hubo algo en ella que cambió, no volvió a ser la misma, en el sentido positivo", recuerda.

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Today I am thinking about this little Afghan refugee girl I met during my time spent in Greek refugee camps last summer with @usaforunhcr . I wonder if she has relocated with her family, and if she is happy and safe. She welcomed me into her small world, albeit briefly, so immediately and so trustingly. That is the magic and truth of children. There was no judgment and no prejudice, just two young girls finding eachother in an unexpected place. She followed me around the whole day, always wanting to play or be in my arms. Her home was torn, and she will likely never return. But from her sheer joy and luster for life, you would never know. We have much to learn from the strength and wisdom of this tiny being! That is why I stand #withrefugees. . . . . . . . #refugees #refugeecamp #refugee #refugeeswelcome #refugeegirl #unhcr #greece #attica #athens #afghanistan #refugeecrisis #afghan #syria

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Ferrer creció con su familia entre Italia, donde todavía viven sus padres, y Los Ángeles, donde residía su abuelo, el actor Mel Ferrer, el primer marido de Hepburn fallecido en 2008. "Teníamos una relación muy cercana. Para mí simplemente era mi abuelo. Era muy divertido, siempre estaba poniendo caras y jugando conmigo".

Entre las películas de su abuela, la favorita de Ferrer es Cara con ángel, aunque también destaca de otros títulos de su filmografía. "En Sola en la oscuridad, vivió con personas ciegas para poder apreciar sus movimientos, y entender cómo todo se basaba en el tacto. Y cuando interpretó a una novicia en Historia de una monja, pasó una temporada en un convento en Francia. Es un nivel de compromiso e implicación que cada vez se da menos en Hollywood".

Tanto ella como su progenitor vivieron con sorpresa el interés del público por la figura de Audrey Hepburn. "A mi padre siempre le solían preguntar por ella y al principio no entendía la fascinación que la gente sentía por su figura, porque para él era simplemente su madre, una persona normal ", comparte Ferrer. "Ahora que ha podido analizar su legado, ya comprende su relevancia".

Artículo publicado originalmente el 26 de marzo de 2018 y actualizado.

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