Si hay algo que se agradece en las redes sociales es la naturalidad de algunas celebrities, su capacidad para reírse de sí mismas y dejar de lado el ansia de perfección para mostrarse verdaderamente tal y como son. Y en eso Ashley Graham ha demostrado una vez más que difícilmente se la puede igualar. La modelo decidió durante la crisis del coronavirus escapar de Nueva York y pasar tiempo de calidad junto a su hijo, su marido y sus padres en el rancho en el que se crió.
Allí ha vuelto a retomar los placeres sencillos, como estar en contacto con la naturaleza, pasear y disfrutar de las comidas caseras que le prepara su madre, Linda. Pero seguramente para lo que no estaba preparada Ashley era para tener que hacer una visita al dentista. Un plan que no ha podido retrasar tras ver el vídeo que ha compartido en Instagram.
Con la mano cubriéndose la boca, Ashley ha explicado como su madre preparó unas galletas caseras de avena y las guardó en la nevera. Con tan mala suerte, que cuando ella decidió comerse una, la mordió y se rompió un diente. Y la modelo no ha dudado en dejar de cubrirse la boca para enseñar cómo ha quedado su sonrisa tras el accidente.
Afortunadamente Ashley se tomó el suceso con humor y no dudó en compartirlo con sus seguidores. Y para tranquilidad de todos ellos, poco después mostró que no había tardado en acudir al dentista para arreglar su diente y que su sonrisa volvía a lucir igual de perfecta que siempre.
La modelo no ha dejado de trabajar durante el confinamiento. En su rancho, y junto con la ayuda de toda la familia, realizó la portada de Harper’s Bazaar UK, en la que reconoció que la cuarentena también ha tenido su parte positiva: «El lado positivo es tener todos estos momentos increíbles y especiales con Isaac, y la nostalgia de estar con mi hijo en la casa en la que crecí».
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