Se está poniendo de moda que las grandes estrellas del fútbol mundial nos muestren los momentos más tiernos de su día a día en las redes sociales. Esos ídolos, antaño alejados del gran público, quieren humanizarse a través de esas píldoras ofrecidas a sus ‘followers’. Ayer, lo veíamos en Cristiano Ronaldo y esa cena con su pareja y su hijo mayor. Hoy, es Leo Messi el que protagoniza el momento tierno del día.
En realidad ha sido su mujer, Antonella Rocuzzo, quien mostraba un vídeo en el que se puede ver a uno de los mejores jugadores de todos los tiempos tirado en el suelo jugando con su hijo Ciro, que se ríe a carcajadas. Lo que hace Messi es tratar de que una botella medio llena dé un par de giros en el aire y caiga de pie (Bottle flip Challenge).
A pesar de que Antonella subió el vídeo a sus ‘stories’ y ya ha desaparecido, algunas cuentas de fans del matrimonio lo rescataron a tiempo y lo han colgado para disfrute de aquellos que llegaron tarde al perfil de la argentina para ver esa estampa familiar.
A Messi donde le gusta hablar es el campo, pero, las pocas veces que ha hablado de su vida privada, ha dado alguna pincelada de sus faceta como padre, con la que está encantado. Tras el nacimiento del tercero de sus hijos, precisamente Ciro, confesó que intentarían ir a por la niña, puesto que tienen tres varones.
«Soy un poco reflejo de lo que fui aprendiendo de mi casa, de lo que me enseñaron de ‘chiquito’ y después fui aprendiendo, madurando, viendo la manera de manejar las cosas. Ya tengo tres así que ahora todo es diferente», dijo en aquella ocasión el ‘crack’ argentino sobre su papel como padre.
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