Anna Barrachina. Así se llama la joven que irrumpió en la prensa del corazón española en el verano de 2015. Hija de Álvaro Muñoz Escassi, uno de los famosos adictos al amor excelencia, y Mercedes Barrachina (mujer con la que mantuvo una relación en Alemania cuando él tenía 19 años y ella 32), desembarcó en nuestro país y acabó viviendo con Lara Dibildos, la que fuera pareja de su padre y que siempre dice de él: “Álvaro no es ex, es familia”. Porque ellos se quieren y se apoyan.

Y así de claro lo tuvo Dibildos cuando le abrió las puertas de su casa a Anna a la que recibió no como hija de su expareja sino como hermana de su hijo (fruto de la relación entre Lara y Álvaro) y aseguraba que la relación entre ellos era maravillosa y esperaba que durase mucho tiempo.

Una vez en España, Anna -que se había criado con su madre en elnorte de Alemania-, aprovechó la oportunidad para estudiar Marketing en ESIC Business & Marketing School. Pero tras varios años vinculada al mundo de la moda, donde ha trabajado como modelo, la hija de Muñoz Escassi se ha entregado por completo a su pasión: la pintura.

Trabajadora, flexible y leal, como se define en su perfil de Instagram, Anna Barrachina comparte su universo artístico a través de una cuenta específica creada a tal efecto en Instagram y a través de su página en Etsy. Las obras, que se sitúan entre los 300 y los 700 euros, son abstractas y se entregan a los compradores con un making off de la obra y una carta en la que explica qué se esconde tras ella.

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