Cuando te duchas, te cepillas el pelo después y ves que dejas más cantidad de la habitual en el cepillo, te asustas. Pero, en los cambios de estación es completamente normal que esto ocurra.
El otoño supone un cambio en el ciclo capilar que viene acompañado de una caída más evidente de la habitual: «Durante la primavera y hasta el inicio del verano, el cabello tiende a crecer y tener más volumen como defensa natural para protegerse de la exposición solar. La llegada del otoño supone un cambio del ciclo natural del cabello que pasa de la fase de reposo a la de caída, los días empiezan a ser más cortos y la luz solar incide directamente en el sistema hormonal, reduciendo el nivel de estrógenos y produciendo un debilitamiento del cabello hasta su caída», explica Adolfo Remartínez, creador de Nuggela & Sulé.
Este año la caída estacional se suma a la estela que la COVID-19 está dejando en el cabello:»El ciclo capilar está completamente alterado por culpa del confinamiento: encerrados en casa, los fotosensores que tenemos en los ojos y que avisan al organismo de que entramos en una época de mayor radiación solar, y que tiene que deshacerse del cabello del invierno y empezar a producir pelo de mayor densidad y volumen para protegerse durante el verano, no detectaron el cambio de estación. Por eso la caída propia del final del invierno, se ha prolongado durante el verano y puede llegar a juntarse con la del otoño. A ello se suman el estrés producido por la situación que estamos viviendo y un efecto secundario de la enfermedad que implica una caída brusca de grandes cantidades de cabello, un efluvio telógeno similar al que se produce después de dar a luz por el cambio hormonal o tras pasar algún tipo de infección. Todo esto, va a poner este otoño a nuestra melena en apuros», añade Remartínez.
Y esto es justo lo que he notado más que nunca nada más empezar a descender las temperaturas. Mechones y mechones y de manera preocupante, así que me hice con unas ampollas poniendo toda mi fe en ellas y esperando a que frenase toda esa caída. Y así ha sido.
El producto se llama ‘Tratamiento Global Anticaída Phytonovathrix’ de Phyto, lo bueno es que engloba todos los tipos de caída del cabello. Tanto para hombres como para mujeres, tanto en caso de caída crónica como puntual. El cabello se fortalece en cada etapa de su crecimiento. La caída se ralentiza, se estimula el crecimiento.
Fortalecido, el bulbo da lugar a un cabello más bonito y más fuerte. Tres veces por semana, se aplica después del lavado sobre el cabello húmedo, raya por raya.
La dosificación es simple, un vial corresponde a una aplicación. Hay que masajear esta loción sin aclarado sobre el cuero cabelludo durante algunos instantes con movimientos circulares, subiendo desde la nuca hasta la parte superior de la cabeza.
La caja de 12 viales corresponde a un mes de aplicación. Se recomienda un tratamiento de 3 meses, pero yo en dos semanas he notado los resultados. Lo seguiré utilizando, por supuesto.
Vía: ELLE ES
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