El pelo canoso ya no es sinónimo de vejez, sino de personalidad. Está tan de moda que hasta hay una comunidad en Instagram que suma más de 146.000 mujeres orgullosas de sus cabelleras grises (@grombre). El movimiento ha llegado para quedarse, porque hasta la reina Letizia y Kate Middleton lucen orgullosas las suyas. La cosmética ha tomado buena nota y lo apoya con campañas como la que ha lanzado Pantene para desterrar esos viejos prejuicios que plantean que las canas hacen interesantes a los hombres y echan años a las mujeres.
Evita que se oxide
La despigmentación de la melanina favorece un proceso de oxidación que se traduce en un color amarillento del pelo. “Además, las agresiones producidas por la contaminación y los tratamientos químicos contribuyen a esta tonalidad, que resulta más visible en el cabello canoso”, apunta David Saceda, dermatólogo especializado en tricología. Para contrarrestarlo, elige productos de lavado y fórmulas de cuidado que incorporen pigmentos violetas y que mantengan los matices fríos.
Le falta brillo
El pelo cano tiende a ser opaco y requiere acondicionadores que reaviven su luminosidad, porque, si no se lleva pulido, puede dar la sensación de descuidado. Por eso debes evitar siempre los productos de styling con acabados mate, como las ceras de peinado, y elegir sérums de brillo que ayuden a crear reflejos.
Frena la deshidratación
El cemento intercelular del cabello se deteriora sin melanina, y la consecuencia es un pelo debilitado y reseco. Una vez por semana, aplícate una mascarilla nutritiva específica para pelo gris. Te ayudará a recuperar elasticidad. También puedes optar por un tratamiento con colágeno en la peluquería.
Planta cara al frizz
Al modificarse la estructura interna de la fibra capilar, el pelo se vuelve más poroso y rebelde, y se encrespa fácilmente. Para evitarlo, David Lesur, director de formación de los salones David Künzle, recomienda el uso de productos capilares con aminoácidos. “Y para revitalizarlo procura que tengan también liposomas, vitamina B3 y lípidos».
Momento de transición
Si has decidido no cubrir más tus canas, María Baras, del Salón Cheska, recomienda hacerlo por fases. “En el pelo fuerte y con coloración previa, hay que arrastrar el tinte y después poner un matiz gris para que crezca sin estridencias. En los finos, las puntas suelen estar debilitadas, así que hay que aclarar poco a poco».
Corte y confección
Un buen estilismo capilar en los cabellos plateados marca la diferencia entre parecer antigua o estilosa. Eduardo Sánchez, director del salón que lleva su nombre, confirma que el pelo blanco corto rejuvenece y resulta muy elegante. “A lo garçon aporta modernidad, al igual que un peinado con los laterales y la nuca más corta y la parte frontal más larga, porque suaviza las facciones».
Operación camuflaje
Hay a quien el pelo blanco le parece de abuela. Pero una vez que aparece la primera cana, el proceso es ya imparable. “La aparición de la canicie es una consecuencia del agotamiento de los melanocitos y tiene una base genética”, apunta el doctor Alejandro Martín Gorgojo, dermatólogo de la Clínica Dermatológica Internacional, quien recuerda la regla de los 50: “A los 50 años de edad, el 50% de las personas tendrán al menos el 50% de su cabello canoso”, señala.
Primeras canas
La pregunta que surge es qué hacer. “Se puede seguir un proceso de aclarado mediante reflejos para buscar la multitonalidad de la melena y disimular el contraste. Otra opción orgánica y 100% natural es el uso de los barros, dado que esta coloración solo actua sobre el cabello despigmentado y evita el cambio de color en el resto del pelo. La coloración permanente se tiene que valorar cuando el porcentaje de canas sea superior a un 15% del total de la melena”, explica la experta colorista Rogelaine Tomé da Costa. La alternativa que propone María Baras consiste en unas mechas babylight de tu propio color combinadas con un balayage en medios y puntas para disimular al máximo las canas. “La clave está en utilizar una técnica muy personalizada. En lugar de un baño de color en el 100% del cabello, solo lo hacemos en un 30%, así, aunque vaya creciendo, no pierdes tu tono”.
Recuperar lo perdido
Hay otra opción más novedosa. Los nuevos repigmentantes prometen ayudar a recuperar el color original del pelo sin teñirlo. Para lograrlo incluyen péptidos que potencian tu propia melanina. Tanto en sérum como en formato nutricosmético, intentan frenar la decoloración del cabello mediante la reactivación de las células pigmentarias. Y lo hacen con activos como la catalasa, la cola de caballo, el zinc o la biotina.
Solución temporal
Si tienes cuatro canas, mejor que no te las quites, ya que puedes dañar el folículo. Apuesta por sprays, polvos y máscaras que maquillan y cubren raíces y canas dispersas. Tienen eficacia hasta el siguiente lavado y sirven para resolver el momento raíz entre tinte y tinte.
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