¿Tú también te despiertas varias veces por las noches sin saber por qué? ¿Te encuentras apretando los dientes durante el día? ¿Te notas más tensa y más sensible de lo normal? Puede que estés pasando por un cuadro de ansiedad y no estés siendo consciente de ello. Estar más nerviosa y más alerta es algo que nos puede pasar (y nos pasa) en muchos momentos de nuestra vida. A veces sabemos cuál es el problema de fondo, pero en muchas ocasiones es el cúmulo de casualidades en nuestro día a día lo que puede derivar en ansiedad.
Y las malas rachas las tenemos todas. Es algo muy común pero no por ello podemos dejar que la ansiedad nos pueda ya que si lo hacemos podría derivar en un problema de salud más complicado. Por ello saber reconocer esos momentos en los que estamos mal y disponer de herramientas para ponerle freno es fundamental.
Benjamin Blasco, CEO de la app de meditación Petit BamBou, asegura que “la práctica de la meditación y el mindfulness (centrarse en el presente) puede ayudar, no solo a mantener la calma en situaciones de estrés, sino que además puede contribuir a tomar decisiones más racionales al tener en cuenta el momento presente sin que los pensamientos y emociones interfieran en ello.” Y nos ha dado cinco trucos para reducir la ansiedad puntual y el estrés:
1. Regula tu respiración.
En cualquier momento del día, especialmente en momentos en que sientas ansiedad “siente como la respiración recorre tu cuerpo, de los pies a la cabeza. Te ayudará a mantenerte centrado en ti mismo/a, en el aquí y ahora.”
2. Visualiza una imagen positiva.
“Una imagen positiva asociada a un sentimiento de seguridad puede calmar tu cerebro. Si piensas en algo positivo, le quitas fuerza al miedo y puedes relajarte.”
3. Enfócate en una actividad que requiera atención.
“Tómate un descanso y dedica un tiempo a realizar cualquier actividad que disfrutes y requiera de tu atención para desviarla de pensamientos negativos o inquietantes: colorear un mandala, cocinar, ver una película, tocar un instrumento…”
4. Recuerda lo que puedes controlar.
“Céntrate en lo que está en tus manos”, en lo que depende de ti y puedes hacer.
5. Medita.
“La meditación de atención plena o mindfulness, siempre y cuando la practiques de manera regular, te puede ayudar a reducir, suavizar o a tratar con la ansiedad o el miedo. Aprenderás a observar tus temores en lugar de luchar contra ellos y a analizarlos desde la calma.”
Y recuerda que si estos pensamientos o sentimientos negativos empeoran o continúan siendo un obstáculo a la hora de dormir, concentrarte o en tus tareas del día a día es importante que busques ayuda profesional. ¡Ánimo, amiga! Todo esto también pasará.
Nuestros periodistas recomiendan de manera independiente productos y servicios que puedes comprar o adquirir en Internet. Cada vez que compras a través de algunos enlaces añadidos en nuestros textos, Condenet Iberica S.L. puede recibir una comisión. Lee aquí nuestra política de afiliación.
Fuente: Leer Artículo Completo