A estas alturas, Celine Dion se ha ganado el título de icono de estilo y reina del street style por méritos propios. La cantante, que se encuentra en Nueva York, es incapaz de salir a la calle con un look de básicos que no llame la atención y cada una de sus apariciones públicas es una una nueva oportunidad para inspirarse e ir un poco más allá de los clásicos estilismos.

Ayer, la cantante posó a la puerta de su hotel con un look que es cualquier cosa menos discreto y que resuelve un problema que a menudo nos planteamos: cómo dar una segunda vida a aquellas prendas que compramos para una boda o una fiesta y sabemos que quedarán arrinconadas en nuestro armario hasta el próximo evento.

La cantante canadiense dejó a sus fans sin respiración cuando salió a saludarlos con una voluminosa falda de fondo rosa estampada con grandes flores blancas y rojas. Una prenda que la cantante combinó con unas botas altas de color blanco y una prenda inesperada: un jersey de ochos en color crema y cuello cisne perfecto para actualizar una falda de fiesta.

La cantante, cuya máxima estilística no es la sencillez precisamente, adornó su jersey con un gran broche de flores en tonos azules que le daba un toque muy especial. Con su melena rubia suelta con grandes ondas y unos pendientes de perlas, Celine volvió a demostrar que no hay look suyo que deje indiferente.

Tras una serie de actuaciones en el Barkleys Center de Nueva York, Celine ha continuado con su exitosa gira en Newark, en el estado de New Jersey. La cantante de My heart will go on ha recibido una calurosa acogida por parte del público y los conciertos de presentación de su último trabajo, Courage, con el que ha vuelto a encabezar la lista Billboard.

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