Si piensas en tu armario de cuando tenía seis años pueden pasar dos cosas: Uno, que ni te acuerdes de qué había dentro; Dos, que fueran vestidos de nido de abeja, rebecas, cuellos bobo y algún que otro pantalón de pana. Esos sí, de marcas de lujo… cri, cri, cri. Pero si te apellidas West Kardashian, de nombre North, la cosa es muy diferente.
Desde que nació, la hija mayor de Kim y Kanye ha sido un referente de estilo en miniatura. A la imagen y semejanza de su madre, hemos podido ver a la pequeña con todo tipo de excentricidades, vistiendo ropa de «mayores» sin importar el precio. Pues bien, en su última aparición en París, en plena semana de la moda, North (o más bien su madre) han conseguido captar la atención con un modelito de uno de los colores estrella del pasado otoño y con el que hace muy poco vimos a Gigi Hadid, por ejemplo: el naranja.
North ha acudido a cenar junto a su madre (y con cara de pocos amigos) con un total look en este tono nada discreto, con un abrigo que ha captado la atención de todos. Un diseño de Dries Van Noten de la colección otoño/invierno 2019 que costaba casi 1.000 euros pero que ahora lo podemos encontrar rebajado en algunas webs por 495 euros.
Un estilismo que no ha pasado desapercibido en las redes y que, como suele pasar en el clan Kardashian, ha sido cuestionado. Algo que, por otra parte, a Kim le importa más bien poco ya que, como ella misma ha dicho en más de una ocasión, North es una fashionista y le encanta elegir su propia ropa.
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