Suele decirse que la moda es cíclica –algo que, por cierto, también se dice sobre la economía–, y que todo lo referente al estilo se inventó antes del cambio del milenio, pero lo cierto es, que para bien o para mal, hay muchas tendencias que vuelven y otras… se van. Sucede cada temporada; por un lado están esas que llevan tanto tiempo con nosotras que han adquirido la exclusiva categoría de básicos imbatibles –os aseguramos que no es tan fácil acceder a este olimpo estilístico– y, por otro, aquellas que son carne de una, dos o, a lo sumo, tres temporadas.
Sin miedo a equivocarnos, podríamos asegurar que 2019 ha sido el año en el que hemos llevado los abrigos, los jerséis y las chaquetas dos tallas más grandes pero hemos apostado por los bolsos cada vez más diminutos –escena que lidera “Le Chiquito”, de Jacquemus– y los hemos llevado por el día, no solo por la noche; también ha sido el año en el que la americana ha sustituido al abrigo y se ha erigido como la chaqueta de las reinas; el de las mangas de organza y las camisas de inspiración victoriana y el de los hombros voluminosos… Así las cosas, ¿qué podemos esperar de la nueva década? En Glamour hemos seleccionado 4 tendencias que, consideramos, NO estarán de moda en 2020.
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El athleisure abandona nuestro armario para quedarse en lo que realmente es, ropa para ir al gimnasio
Las hermanas Hadid fueron unas de las primeras en apuntarse a la moda del athleisure. Hubo un tiempo en que lo más cool era salir en leggings a la calle, combinarlo con un top o una camiseta de inspiración deportiva y unas zapatillas y completar el look con un 2.55 de Chanel, por ejemplo. Por suerte, parece que cada vez se queda más atrás esta tendencia que, en realidad, nunca debió salir del lugar para el que nació, es decir, el gimnasio.
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El oversized se relaja a favor de una silueta más neutra y más comedida
Lo cierto es que, cuando empezaron a verse las siluetas una o dos tallas más grandes –los vaqueros boyfriend y los abrigos masculinos inspirados en el armario de tu chico–, tenían bastante gracia. Y, ojo, continúan teniéndola porque nunca podré decir nada malo de unos vaqueros un poquito grandes o de un abrigo de una talla más. Pero sin pasarse. Di adiós a las mangas mega voluminosas, a los jerséis que casi son vestidos y a las chaquetas gigantescas porque 2020 será el año del tailoring, de la silueta comedida, mucho más sobria pero mucho más favorecedora.
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Cada vez veremos menos minifaldas porque la falda midi ya es un básico
Algunas se resistieron al principio a ese largo que llega a mitad de pantorrilla, que es un poco de madre y un poco de monja pero que queda increible con absolutamente todo. Y aunque la minifalda sale a la palestra cada cierto tiempo, es verdad que, el 2020 será una prolongación de 2019 en cuanto a centímetros se refiere. Los vestidos y las faldas seguirán siendo midi.
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Seguiremos llevando sneakers, pero cederán protagonismo a mocasines masculinos y bailarinas
Tras algunas temporadas siendo las únicas protagonistas de los mejores looks de Street Style, ya era hora de que las zapatillas deportivas cediesen terreno a opciones más sofisticadas. Y aunque, que no cunda el pánico, nunca diremos no a un par de Converse All Star, bien es cierto que nos apetece que no nos miren raro si llevamos nuestros pantalones de vestir favoritos con unos Carel Paris de tacón cómodo o unas bailarinas.
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