Fue uno de los episodios más sonados de este verano. Sofía Suescun y Kiko Jiménez se habían metido en un lío como consecuencia de una trifulca con la policía de Marbella cuando intentaban acceder al Starlite Festival. Si tenían o no acceso, quedó en un segundo plano por las formas que tuvieron con los agentes y que, ahora sabemos, ya tienen consecuencias.

Mientras que él aún deberá esperar (en su teléfono, a disposiciónn judicial, habría vídeos más que clarificadores) para conocer su cndena, sí ha salido a la luz estos días que la que fuera ganadora de ‘Gran Hermano’ tiene sobre la mesa la cifra a la que va a tener que hacer frente para evitar males mayores.

La sentencia establece que la navarra debe abonar 1.000 euros por negarse a identificarse e insultar a la Policía de Marbella. Una cantidada que a algunos se les antoja escasa a tenor de la gravedad de los hechos y de cómo pudieron exhibirlo en los medios de comunicación en su momento.

Desde el primer momento, ambos han mantenido la inocencia, a pesar de que las fuentes policiales hablan de otra cosa. Sobre todo de otro tipo de comportamiento en el que los dos jóvenes habrían tratado de intimidar a la policía utilizando su fama como arma. Algo que puede serles un agravante en ese juicio que aún tiene Kiko pendiente.

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