Gucci o por qué el colorete es el producto más funcional

Cosmogenie ha sido el nombre que ha recibido el último desfile de Gucci. El show orquestado por Alessandro Michele desplegó sus alas este domingo en el Castel del Monte, una edificación sita en la región italiana de Apulia. Ambientado en un ecosistema cósmico, como su nombre anticipa, las propuestas han estado llenas de colorido y brillo, una apuesta que ha continuado en los beauty looks a través de los labios y, sobre todo, el colorete.

El blush se ha convertido en el producto estrella en los maquillajes de la firma italiana, confirmando así la tendencia que viene tomando fuerza desde hace semanas: el rubor está recuperando su lugar en el neceser de maquillaje, un puesto que por algunos años dejó en un segundo plano el uso masivo de contorno. Ahora Gucci propone exprimir todo el potencial de este producto utilizándolo de diversas maneras sobre las mejillas e incluso aplicándolo sobre los párpados. Así se convierte en un imprescindible, sea cual sea tu estilo de maquillaje.

Colorete sobre rostro desnudo

Alessandro Michele ha dado fuerza a la presencia del colorete presentándolo como absoluto protagonista de algunos looks de belleza. Para ello ha construido un rostro desnudo con un make-up no make-up de acabado mate. Los contornos del rostro cobran protagonismo y se perfilan ayudándose del cabello, que se mantiene en su textura natural, creando entre todos los elementos un aspecto muy natural de reminiscencias hippies. Sin embargo, hay una elemento que rompe con toda esta estética: un rubor rojo de alta pigmentación se coloca en el centro de los pómulos en dirección ascendente, convirtiéndose en el centro de todas las miradas.

Blush, como símbolo de salud

Lucir unos mofletes sonrosados ha sido un sinónimo de salud y juventud a lo largo de la historia. Este constructo social se refuerza en las narrativas audiovisuales, aderezándolo con toques de inocencia y candidez, y también se ha reflejado en el desfile. Algunas modelos lucen el mencionado producto concentrado en la parte central del pómulo aplicado de forma circular, para recrear ese aspecto que tantas veces hemos visto en las películas de Disney. Como hilo conductor en los beauty looks se mantiene el tono rojo como color predominante, una tonalidad que favorece a todo tipo de pieles.

Rubor en los párpados

Los rostros cubiertos de un color sutil y difuminado que no entiende de límites ha sido otra de las propuestas de la firma italiana. El rubor se posa en las mejillas, pero también asciende manteniendo la tonalidad y la delicada intensidad por los párpados. Estos looks se complementan con un labio intenso de aspecto vinílico que compite en protagonismo con el colorete. En la imagen se puede ver uno de los accesorios más llamativos del desfile, unos pendientes que se deslizan desde la oreja a la boca anclándose en la comisura de los labios.

Colorete sin límites, como en los 80

El desfile ha presentado una clara inspiración en los años 80 para algunos looks. En aquella década, donde la creatividad primaba en los maquillajes, el rubor experimentó una de sus etapas más álgidas. El desfile de Gucci recrea la tendencia colocando el colorete en la parte más alta de pómulo, en la sien e incluso en la frente. El producto se aplica con una gran intensidad y se complementa con un toque de iluminador en las elevaciones de la cara.

Esta tendencia ya se ha trasladado al street style, aunque de manera más suave. El mercado ofrece ya opciones de productos aptos para aplicar tanto en mejillas, como en labios y párpados, confirmando que la economía del espacio y la sostenibilidad son dos tendencias de larga duración que se mantienen al alza.





Fuente: Leer Artículo Completo