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La Fábrica de la tele ha trabajado junto a la hija de ‘la más grande’ en un documental muy interesante para todos los fans de Rocío Jurado. «En estos momentos una impactante construcción vertical se levanta a las afueras de Madrid. La que fue la casa de Rocío Jurado durante los últimos 20 años se reconstruye en una enorme casa de muñecas», anunciaban el ‘Sálvame Lemon Tea’. En el avance aparecía Rocío Carrasco desembalando las pertenencias de su madre después de tantos años guardadas y la emoción se palpaba en el ambiente.

Rocío Carrasco también ha encontrado en esos contenedores varias cajas con objetos de José Ortega Cano y de sus hijos, José Fernando y Gloria Camila, y la hija de ‘La más grande’ no ha dudado en enviarlas al domicilio del maestro. Pero parece que Ortega Cano no está muy de acuerdo y ha preferido no aceptar esas cajas. «Prefieren que lo hagan mediante los abogados», explicaban en ‘Sálvame’.

Gloria Camila ha estado esta tarde en ‘Ya son las ocho’ y no ha ocultado que viendo el avance del documental se ha emocionado mucho: «Con el tráiler, he llorado sola en mi casa viéndolo. Yo no tenía conocimiento de que existiese eso y después de 15 años lo veo… También he visto las cosas de la casa. La mesa de la salita, el tambor… Ha sido como volver 15 años atrás, que es donde te quedas y te vas», reconocía la joven.

«Me da mucha pena la situación (…) Al final es la hermana mayor dándole cosas a los pequeños que igual no recordamos. Siempre me está faltando esta parte», se sinceraba Gloria Camila. Ella no cree que tenga que dar el paso para hablar con su hermana, pero si que la espera: «Le doy el tiempo que ella necesite y quiera para que me llame y hablar».

¿Y por qué no ha aceptado las cajas su padre Ortega Cano? Gloria Camila ha explicado que su tío Aniceto le ha pedido al repartidor que entrara con la furgoneta dentro de la casa para no hacer la entrega fuera puesto que había muchas cámaras. «El repartidor le dice que no puede entrar dentro porque le han dicho que reparta fuera. Entonces claro, mi tío dice que en la puerta no y que a ver qué dice mi padre. Mi padre dice que en la calle no, que son muchísimas cajas y que no van a estar ahí fuera.

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