Alba Carrillo y Santi Burgoa pusieron fin a su relación a finales de septiembre tras casi dos años de relación. «Le quiero muchísimo, es una persona muy importante, lo ha sido y espero que lo siga siendo. Ahora mismo estoy un poco enfadada, si no no lo hubiéramos dejado, pero en cuanto podamos hablar y normalizaremos, va a ser una persona importante en mi vida… Le agradezco muchísimas cosas, pero en la vida las cosas cambian y no pasa nada, hay que evolucionar como pareja, pero no como personas«, comentaba la presentadora tras desvelar su ruptura e insistía en que no había tercera personas.

Ha pasado casi un mes y parece que la colaboradora de la sección ‘Fresh’ de ‘Ya es mediodía’ y su ex han hablado y limado esas asperezas, de ahí que el periodista acudiese a la casa de Alba hace unos días. ¿Se habrán reconciliado? La modelo se ha mostrado directa en su respuesta: «No hay reconciliación. Hay personas que tiene que estar en tu vida sea de la manera que sea y de momento nos seguimos queriendo, somos amigos y el tiempo dirá».

Entonces… ¿qué hacía Santi Burgoa en la casa de Alba? El motivo era otro bien distinto. El presentador no iba a ver a Alba sino al hijo de la modelo (fruto de su relación con Fonsi Nieto) que cumplía 10 años. «Era el cumpleaños de mi niño y él le quiere mucho, se quieren mucho los dos y me pareció precioso que viniera a darle un beso», ha confesado Alba.

La colaboradora televisiva también ha avisado que no será la última vez que veamos a Santi por su casa. «Lo vais a ver en mi casa mucho porque somos como familia. Porque cuando dos personas se quieren y no se han hecho nada por qué no se van a llevar bien. Yo le quiero en mi vida, da igual la forma. O estoy madurando o él es buena persona, o las dos cosas», ha reconocido.

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