Aunque no es necesario hacerse con la colección de brochas y pinceles de un maquillador profesional, que puede tener hasta más de 40 tipos diferentes, sí es más que recomendable familiarizarse con algunas de ellas y usarlas a diario. Las brochas y los pinceles ayudan a conseguir un maquillaje mucho más definido, más natural y a aprovechar el producto al máximo.

Pero, para sacarles todo su partido es fundamental saber para qué sirve cada una de las brochas y cómo utilizarlas. Es probable que a la hora de comprar alguna te hayas visto algo perdida ante tanta variedad y puede que ya tengas más de una en casa que no sabes si estás utilizando correctamente y si es la más idónea para aplicar la base de maquillaje o los polvos de sol. Por eso, te contamos aquí para qué sirve cada tipo de brocha y cuáles son las que debería haber en tu neceser.

Brocha de contouring

Estas brochas cortas con un acabado asimétrico son ideales para los trabajos de contouring, es decir, para la técnica de maquillaje que juega con las luces y las sombras esculpiendo el rostro. Su forma está diseñada para adaptarse perfectamente a los ángulos del rostro llegando y cubriendo con precisión todos ellos.

Cómo usarla: Aplicar en la parte superior de la frente y a lo largo de la mandíbula y difuminar para un rostro con relieves marcados. Si se busca un efecto esculpido, dibujar un 3 desde la frente hacia las mejillas.

Brocha para colorete

Las brochas con forma redondeada y tupidas pero ligeras son las idóneas para aplicar el colorete. Su diseño permite definir los pómulos y realzar los contornos.

Cómo usarla: pasa la brocha por el colorete y da después un par de toques en el dorso de la mano para retirar el exceso de polvos. Aplicar de arriba abajo, desde la parte del pómulo de debajo del ojo, hacia abajo.

Brocha para polvos bronceadores

Para aplicar los polvos de sol necesitamos un tipo de brocha gruesa y compacta que asegura una aplicación uniforme y compacta por todo el rostro, el cuello y el escote. Esta de Guerlain, está a medio camino entre la brocha clásica (de mango largo) y la Kabuki (de mango muy corto).

Cómo usarla: Recoger con la brocha producto y aplicar por todo el rostro de manera ligera.

Pincel de contorno

También existe una brocha específica para aplicar el corrector de ojos. Si buscamos un acabado perfecto, esta es fundamental. Se trata de un pincel pequeño, de forma redondeada para poder llegar bien a la zona de debajo del ojo pero también sirve para disimular imperfecciones de cualquier parte del rostro.

Cómo utilizarlo: se puede usar este pincel para difuminar el corrector en la zona del contorno del ojo o donde se quiera o para conseguir una mayor cobertura.

Brocha para la base de maquillaje

Cuando utilizamos un maquillaje líquido o en crema, la brocha ideal es la que se conoce como “lengua de gato”. Con forma redondeada y ligeramente plana. Su diseño permite repartir de manera uniforme todo el producto y no dejar marcas, ni líneas en el rostro. Utilizar una brocha para este tipo de maquillaje es fundamental para no malgastar producto.

Brocha para polvos iluminadores

Esta brocha con forma de abanico, es perfecta para aplicar los polvos iluminadores. Consigue una aplicación ultra ligera y también viene bien para eliminar el exceso de producto sobre la piel.

Esponja de maquillaje

Desde que aparecieron revolucionaron el mundo del maquillaje y quien las domina, es capaz de hacer auténticas maravillas. Aunque su uso más común es el de aplicar de manera uniforme el maquillaje y la base de textura fluida, también se puede utilizar para contornear el rostro e incluso aplicar colorete e iluminador en crema. La última incorporación a esta gama de herramientas es la esponja de silicona, para un acabado más ligero y un mayor aprovechamiento de producto.

Cómo utilizarla: humedecer la esponja, escurrirla y extender el maquillaje con ella por todo el rostro.

Pincel delineador para ojos

Este pincel con un acabado biselado es perfecto para aplicar la sombra a modo de delineador sobre la línea de las pestañas o para difuminar un eyeliner. Con un poco de habilidad, su forma oblicua te permitirá trazar una línea con precisión.

Cómo usarlo: si lo utilizas para delinear, utiliza la punta del pincel, trazando una línea desde el exterior del ojo al interior. Si vas a aplicar sombra con él, recuerda dar un par de golpecitos para eliminar el exceso de producto.

Esponja limpiadora de pinceles

Además de elegir la brocha adecuada, también tienes que tenerlas limpias y cuidadas para conseguir un maquillaje perfecto. Este limpiador de brochas en seco permite eliminar los restos de polvos y pigmentos sin necesidad de mojarla, pudiendo cambiar de color sin esperar a que se seque.

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