La pasión de Kate Middleton por el universo de Alexander McQueen no es ningún secreto. La aclamada firma de lujo cuenta con un lugar privilegiado en el vestidor de la duquesa de Cambridge y así lo ha demostrado en la última década. Desde su vestido de novia hasta los diseños elegidos para la boda de su hermana Pippa o los bautizos de sus tres hijos, sin olvidar el enlace de Meghan Markle y el príncipe Harry, han contado con el sello de la etiqueta británica.

Pero no solo ha apostado por la casa para importantes eventos familiares o citas de renombre como los Premios Bafta. De las manos de Sarah Burton, directora creativa de McQueen tras el fallecimiento del creador, han salido muchas de las propuestas que la royal ha llevado a compromisos más informales. Sin ir más lejos, hoy mismo Middleton ha reafirmado su confianza en Burton con un nuevo look donde un diseño de la etiqueta es el gran protagonista.

La duquesa de Cambridge en compañía de su marido, el príncipe William, se han trasladado a la estación de Waterloo en Londres, para recorrer algunos puntos de la capital de Reino Unido y descubrir algunos retratos presentados al proyecto Hold Still, puesto en marcha por ella misma durante el confinamiento. Una ocasión especial para Middleton en la que no ha dudado en estrenar un diseño único y especial de su firma fetiche: un abrigo largo de estilo clásico, entallado, atractivo color rojo, doble abotonadura y solapas. Una elección muy favorecedora, sin duda esta tonalidad tan propio del entretiempo es una de sus favoritas.

Para completar el estilismo, Kate ha elegido un sencillo top blanco y falda midi en negro, al igual que sus complementos: stilettos de ante con tacón ancho de Gianvito Rossi y bolso de piel también de sello británico, en este caso de la creadora Grace Han.

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