Cada grano de arena cuenta para hacer una montaña y conseguir un cambio visible. En este caso, cada abarca menorquina. Y es que cada modelo salido del taller de Pwani Menorca es un paso más para limpiar las costas menorquinas de los residuos plásticos, apostar por la moda sostenible y dar al planeta el respiro que se merece.
Pwani Menorca es una firma de calzado fundada por Nico y Clara, dos aventureros, diseñadores y amantes de la isla de Menorca, que tras un viaje a Tanzania dieron un nuevo rumbo a su vida. A su vuelta, contactaron con la ONG Per la Mar Viva, dedicada a limpiar los plásticos del litoral menorquín, y decidieron dar una salida a todos esos residuos no reciclables. Tras dos años de investigación crearon Pwani Menorca, una línea de abarcas cuyas suelas están hechas a partir de tres botellas de plástico, consiguiendo dar una nueva vida a los materiales recogidos en las costas menorquinas.
Las nuevas abarcas han superado las pruebas más exigentes de resistencia y durabilidad recomendadas por el Instituto Tecnológico del Calzado. Uno de sus rasgos distintivos es que en su proceso de fabricación no se cose la suela con la plantilla sino que se encola mediante una técnica especial que mejora su acabado.
Los dos tenían claro que querían apostar por el calzado tradicional: «La abarca está en nuestros genes… es un elemento típicamente menorquín que proviene del campo, de los payeses cuya sabiduría les empujó a encontrar un calzado fresco, cómodo y resistente que se pudiera fabricar con los elementos que tenían a mano. Cuando llega el buen tiempo, ponerse unas menorquinas de hombre, de mujer o de niño es un must para cualquiera».
Cada par de abarcas se produce de manera local, en talleres de Menorca, para reducir al máximo la huella ecológica: «No lo concebimos de otra manera. Menorca es un territorio pequeño donde miramos apoyarnos los unos a los otros para seguir avanzando. Es más fácil pensar en local para luego poder actuar en global», cuentan Nico y Clara.
Ambos tienen claro que es lo que más les gusta de su proyecto: «Que hemos conseguido cerrar el círculo. Le damos salida a un material que nunca tendría que haber estado en el mar, colaboramos con un proyecto solidario, damos continuidad a un calzado tradicional, producimos una actividad que genera riqueza en nuestro entorno…», afirman convencidos.
Tanto Nico como Clara responden afirmativamente ante la pregunta de si hay un problema de falta de conciencia: «Hay un problema de conducta que proviene de esta inconsciencia de nuestros actos. Ahora el foco lo estamos poniendo en el mar pero el problema ya viene de la tierra, donde se utiliza el suelo como una auténtica papelera. ¡Para muestra las mascarillas o los guantes que están apareciendo! Por suerte, pero, cada día hay más ‘Gretas’ en el mundo que se han dado cuenta de que no podemos seguir y que estamos convencidos acabarán siendo mayoría».
Como a muchas empresas, la crisis del coronavirus trastocó los planes de Pwani Menorca e hizo saltar por los aires gran parte de su planificación, pero no ha impedido que sigan trabajando con la mente puesta en nuevos proyectos: «Tenemos un par de ideas relacionadas con la preservación del medio ambiente y la moda que nos gustaría sacar adelante pero las estamos dejando reposar, como la buena cocina. Los ingredientes los tenemos, eso si».
Fuente: Leer Artículo Completo