Las 7 lecciones de moda y tendencias que he aprendido a mis (casi) 30 años

Cuando se trata de cumplir años, soy de las que se emocionan desde un mes antes. También me ocurre que me gusta ver fotos antiguas y comprobar qué ropa llevaba o qué estilo era mi favorito, no sin darme cuenta que a veces las decisiones eran un poco dudosas. Con el tiempo he ido aprendiendo y hoy, a unos días de cumplir 28 y con los 30 a la vuelta de la esquina, hay 7 lecciones (y sus tendencias correspondientes) que agradezco haber aprendido a lo largo de los años.

1. "Uniforme" NO es una mala palabra.

Lo decimos en serio. Sabemos que leerla te puede remontar al cole, pero cuando la usamos en el mundo de la moda se convierte en el truco perfecto para crear la base de tu estilo propio, de tener ese puñado de prendas que formarán los estilismos salvavidas que funcionan cualquier día y te sientan genial.

2. Los vaqueros serán tus mejores amigos de por vida.

Sobre todo si hablamos de unos de corte recto y de tiro alto. De esos que te pueden recordar a Monica Geller y a las chicas de Sensación de Vivir, pero que sabes de sobra que te sientan de cine, te hacen un culazo y que combinan con todo tu armario.

3. Los tacones cómodos sí existen.

Son los más tendencia del momento, vienen finitos como los kitten heels o cuadrados y anchos, pero no sobrepasan los 6 centímetros y estilizan tanto como los de 10 centímetros y son tan cómodos como tus zapatillas deportivas favoritas.

4. Un escote pronunciado ≠ ser sexy.

Lo digo muy en serio, ser sexy no pasa por llevar la ropa más provocativa. Ser sexy pasa por estar cien por cien cómoda contigo misma. Ser sexy es llevar los escotes en la espalda que tanto lo están petando. Vamos, la verdad es que no hay nada más sexy que una mujer que se lo cree.

5. Calidad > Cantidad.

O lo que es lo mismo, menos siempre es más. Porque amiga, está bien pasar de alguna que otra tendencia, lo que importa es buscar prendas que aporten algo a tu guardarropa, que de solo verlas puedas imaginar más de cinco looks con ellas y que, además, sabes que te podrán durar años dentro de él.

6. El lipstick rojo SIEMPRE es una buena idea.

De hecho, es la guinda del pastel que puedes añadir a cualquier estilismo y verte súper elegante, sexy y chic. Da igual que lleves el cárdigan noventero más tendencia o la camisa blanca más clásica de tu armario.

7. Siempre experimenta.

Porque la moda se trata de equivocarse y aprender que algo te queda bien -como me pasó a mi con los vestidos largos-, de divertirse con los colores, como cuando me propuse el reto de huir del negro, o los estampados y siluetas. Porque si algo me han enseñado los años es que lo que importa en esta vida no es "encajar", sino estar contenta con quién eres y que la moda es uno de esos placeres necesarios que hacen de la vida un lugar mucho más bonito.

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