La señal más inequívoca de que el verano está dando paso al otoño es que las tiendas de ropa están sustituyendo las prendas florales por otras de estampados ingleses. Los otoños son especialmente fructíferos en ese aspecto, pues no hay septiembre que no venga cargado de tartanes, Príncipes de Gales, mil y una declinaciones del gris, cuadros escoceses y patas de gallo. Este otoño es este último el estampado que más protagonismo tiene y solo hace falta echar un vistazo a las capitales de la moda y a sus circuitos para hacerse a la idea. Dolce&Gabbana, Chanel, Gucci y Celine – entre otros muchos – se han encargado de proponer el regreso y Zara y H&M de consolidarlo y hacerlo extensivo a todas las mortales fashionistas.

Ambas marcas han coincido en declinar el estampado pata de gallo de una forma muy concreta, a saber, un vestido de largo midi que se lleva sí o sí con botas altas y negras. Estos son los dos modelos que evidencian la sintonía entre Zara y H&M.

· El de Zara

© Cortesía de Zara

· El de H&M

© Cortesía de H&M

Todas las aquí presentes somos lo suficientemente avispadas en materia de moda y tenemos bastante memoria para saber qué significa que dos popes como Zara y H&M coincidan en una misma tipología de prenda. Clarísimamente, que se avecina tendencia. Y de las grandes. No es solamente por el vestido en sí, sino por el estilismo propuesto que se vale de la bota de caña alta y arrugada (otra tendencia masiva ya consolidada del 2019) para terminar de ser perfecto. ¿Será esta la fórmula más fácil de vestir bien en otoño? De ser así, sobra decir que la aprobamos.

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