Estaba en un momento excelente: hacía ‘Aquí hay madroño’ en Telemadrid, tenía un proyecto de radio sobre la mesa, una obra de teatro, ‘Enlatados’, con todas las entradas vendidas y ¡hasta un papelito en una peli! El confinamiento lo ha bloqueado todo, pero a Carmen Alcayde no hay quien la pare y nos presenta su nueva creación: un cuento para niños que lleva por título: ‘Un verano espacial’, de la editorial Sargantana.
Carmen, después de tres novelas, ahora sacas un cuento. ¿Cómo se te ocurrió la idea?
Era un cuento que empezó contándoselo mi marido a mis hijos, porque el científico que protagoniza la historia, es real. Es un tío suyo. Con él, con mis hijos y con el resto de primos nos reuníamos todos los veranos en Denia. Y los niños alucinaban con sus inventos. Un día, a mi chico se le ocurrió que podía publicarlo. Así que, me puse a ello, le di forma y ahí está, en todas las librerías.
Los protagonistas llevan los nombres de tus hijos.
Sí, Carmen, Edu y Olivia son los niños que descubren el cohete que ha fabricado su tío con materiales reciclados y se van al espacio.
¿Qué sentiste cuando tuviste el libro en las manos?
Pues imagínate… Aluciné y me hizo muchísima ilusión porque la ilustradora, Mamen Marcén, ha plasmado exactamente lo que quería. ¡Hasta los niños son clavados a mis hijos!
¿Qué te dijeron ellos al verlo?
Pusieron unas caritas de ilusión que no te imaginas… Para ellos fue una auténtica sorpresa porque mi marido y yo lo hicimos en secreto. Y cuando se lo enseñamos decían: «¡Si somos nosotros!», «Si es el cuento que nos contabais…» Eso ha sido lo más bonito: ver a mis hijos emocionados al verse en un libro.
¿Y ellos se animan a escribir?
Pues a los mayores se les da muy bien escribir. De hecho, Carmen ganó un premio de poesía en el cole y a Edu le han publicado un cuento en la revista. Olivia, aún es muy pequeña y no sabe. Tiene cinco años…
¿Eres de las mamás que les lees cuentos todas las noches?
Con ‘El madroño’ no podía porque cuando llegaba a casa, ellos ya estaban durmiendo. Eso es algo que he recuperado en el confinamiento.
¿Cómo lo estáis llevando?
La verdad es que bien porque yo hago locuras con mis hijos; les hago cosquillas, jugamos, cocinamos, nos reímos, hacemos programas en directo en Instagram… Y la hora del cuento me gusta mucho porque aprovecho para estar con ellos y que me cuenten confidencias. Si se lo pasan bien en el cole, si tienen algún problema, todas esas cosas que luego sirven mucho.
¿Echan de menos el cole?
La verdad es que sí. Y creo que si ha servido para algo este confinamiento es para que los niños echen de menos sus rutinas y aprecien lo que tenían. Cosas que daban por hecho que eran así por el simple hecho de haber nacido. Y ahora se han dado cuenta de que la vida es un regalo, pero que tienes que currarte un montón de cosas porque hoy están y mañana no. Además, en un futuro estarán más preparados que nosotros si esto vuelve a pasar. Por lo menos en tecnología… (Risas).
Pero si tú estás puestísima… Han parado ‘Aquí hay madroño’, en Telemadrid y tu obra de teatro, pero ahora los haces en IG… ¡No paras de reinventarte!
(Risas) Yo quiero estar siempre muy al día de todo y me siento mucho más niña que muchos jóvenes. Ésa es la verdad. Este confinamiento me ha abierto muchísimo la mente; cada día se me ocurre una cosa. Y de hecho hago un día un programa de comedia, otro de baile, otro de niños, con sorteos y ¡hasta madroñeros por el mundo! ¡Y todo en Instagram!
El caso es no perder el contactocon el público.
No hay que pararse y, sobre todo, hay que hacer cosas que te hagan feliz. Yo creo que es el momento de que cada uno descubra para lo que realmente ha nacido. Yo, porque he tenido la suerte de trabajar en lo que siempre he querido. Así que estoy encantada. Es verdad que estoy parada y que estaba en un momento excelente: las entradas del teatro estaban todas vendidas, teníamos incluso gira programada, el ‘Madroño’ iba como un tiro, me habían ofrecido un programa de radio e incluso un papelito en una peli importante.
«Hago más deporte ahora que antes»
¿Qué peli?
Todavía no lo puedo contar, pero ya está rodada. Es un papelito muy pequeño pero estoy súper contenta. Ya te digo que era mi momento, pero en vez de lamentarme, pienso: mi vida es ésta y hoy. Vivo el día a día y ya está.
Y encima no vas a engordar,como todos los españoles…
¡Si no paro! Hago más deporte ahora que antes. En casa ando de un lado para otro continuamente. ¡Hasta habré adelgazado! Y no veas lo que como…
¿Cómo llevas lo de pasar 24 horas al día con tu marido?
La verdad es que muy, muy bien. Siempre hemos sido súper amigos. El otro día nos pusimos en la terraza con unas cañitas, la cenita, musiquita… Estamos recuperando nuestros momentos porque yo no paraba en casa… Con el confinamiento he recuperado a mi marido y mis hijos.
¿No tienes fecha de vuelta para ‘Aquí hay madroño’?
Pues, de momento, lo único que sabemos es que volver, volveremos, pero no sabemos más.
¿Qué es lo primero que quieres hacer cuándo se acabe el confinamiento?
Pues mira, echo de menos a mi madre, a mis hermanos y las comidas de los domingos, así que eso es una de las primeras cosas que haré en cuanto se pueda. Pero lo que más echo de menos es bailar con gente muy pegada hasta las tantas de la mañana. Lo hacía muy poco y me he dado cuenta de que tengo que hacerlo mucho más.
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